- La afición lagunera está de fiesta con el triunfo conseguido anoche por Santos Laguna sobre Jaguares de Chiapas por 2-1 en el juego de vuelta de cuartos de final, que le dio el pase a la semifinal por global de 4-3, y desde ahora sueña con verlo en la final disputando el campeonato.
La baja temperatura registrada en la Comarca se reflejó en la asistencia al partido de ayer en el Estadio Corona, que no registró un lleno completo, pero ni el frío y el aire helado que hubo durante el encuentro ahuyentó a los aficionados de corazón.
El equipo de Jaguares fue apoyado por un grupo de alrededor de cien aficionados que hicieron el viaje desde Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en dos autobuses. Los porristas chiapanecos agitaron globos de color naranja para apoyar a su equipo en todo momento.
La porra visitante fue acordonada por un grupo de elementos de seguridad para evitar un posible enfrentamiento, ya que quedó ubicada en la cabecera Sur a un lado de La Tribu, porra comandada por Magda Tovar, sin embargo no hubo incidente alguno entre los seguidores de ambos equipos y llevaron "la fiesta en paz''.
En su lugar de costumbre estuvo La Komún con un nutrido grupo de porristas, que ondearon sus banderas durante todo el encuentro.
La primera exclamación de gol fue un remate de cabeza del ecuatoriano Christian Suárez al minuto 13, que obligó a Édgar Hernández a emplearse a fondo, prendiendo la mecha en la tribuna.
Rodolfo Salinas ensayó el tiro de larga distancia con etiqueta de gol al minuto 34, pero la cabeza salvadora del ex santista Gerardo Espinoza desvió a tiro de esquina, cuando el gol se coreaba en las tribunas.
Siete minutos después, al 41, estalló el grito de gol en las tribunas del Estadio Corona, cuando el latigazo de derecha de Carlos Darwin Quintero pegó en la base del poste y se introdujo a la portería chiapaneca. La afición lagunera festejó con gran euforia la anotación del colombiano.
Los focos de alarma se prendieron al minuto 47, Oribe Peralta chocó con el guardameta visitante Édgar Hernández, afortunadamente "El Cepillo'' logró recuperarse, aunque finalmente salió de la cancha al minuto 85.
Los seguidores santistas reclamaban penalty, pero el silbante Roberto García Orozco no lo consideró así.
El Estadio Corona enmudeció al minuto 50 cuando el colombiano Franco Arizala estrelló su disparo en la base del poste, pero Luis Gabriel Rey voló su disparo al contrarremate y todo quedó en un susto.
Santos Laguna navegaba en aguas tranquilas, pero un cabezazo letal de Jackson Martínez a centro de Christian Valdez empató el marcador al minuto 66 y puso en apuros a los Guerreros.
El grito de ¡no, no! se escuchó en las tribunas cuando empezó a calentar Carlos Ochoa, quien ingresó de cambio al minuto 70 por Carlos Darwin Quintero.
La afición lagunera enloqueció con la gran jugada individual de Oribe Peralta al minuto 73, quien en un dechado de técnica individual puso en "bandeja de oro'' el balón a Daniel Ludueña para que lo enviara al fondo de las redes y pusiera adelante a los Guerreros 2-1 ante la algarabía de los aficionados.
Daniel Ludueña perdonó a los Jaguares al minuto 88 al tardarse en definir una gran jugada que había realizado Carlos Ochoa y que pudo haber sido el 3-1 a favor de los Guerreros.
El silbatazo final de Roberto García Orozco produjo la alegría en las tribunas. Los aficionados se pusieron de pie para ovacionar a su equipo y festejar el triunfo obtenido ante Jaguares, un rival que cayó con dignidad.
Desde afuera del Estadio Corona se sintió el ambiente previo al encuentro por el pase a la semifinal del Apertura 2011. (Foto de Enrique Terrazas)