Bacteria mortal. Los antibióticos desarrollados no son garantía y han enfrentado los especialistas.
Enfrentado a un brote sin precedente de E. coli, un equipo de médicos alemanes prueba algo nuevo: una terapia con antibióticos que algunos temen pueda ser más perjudicial que benéfica.
El tratamiento ha demostrado éxitos iniciales, pero hay preocupaciones sobre posibles efectos secundarios fatales.
El doctor Friedrich Hagenmueller, director médico del Hospital-Altona Asklepios en Hamburgo, la ciudad norteña centro del brote, dijo que vale la pena probar una terapia heterodoxa cuando están en juego las vidas de los pacientes. El brote más mortífero de E. coli ha matado a 24 personas y ha infectado a más de dos mil 400. La mayoría de las infecciones bacteriales es tratada con antibióticos, pero funcionarios de la Organización Mundial de la Salud y de los Centros para Control y Prevención de las Enfermedades de Estados Unidos (CDC) recomiendan no usarlos en casos de E. coli por temor a que puedan hacer que la bacteria despida toxinas más rápidamente.
Tanto la OMS como el Centro dicen que el uso de antibióticos para combatir E. coli podría justificarse en casos excepcionales.
El único tratamiento convencional para E. coli es beber agua y reemplazar los líquidos por vía intravenosa, pero Hagenmueller afirma que se necesitan métodos más enérgicos debido al riesgo de desencadenar una situación que pueda causar una insuficiencia renal mortífera que ha afectado a un número sin precedente de 462 personas durante el brote.
En medio de indicios iniciales de éxito, unos pocos hospitales alemanes han empezado a probar tratamientos con antibióticos.
"La idea es destruir la bacteria desde el comienzo", explicó Hagenmueller.
Andrea Ellis, epidemióloga de la OMS, dijo que la agencia recomendó no usar antibióticos para el E. coli debido a que acelera la liberación de toxinas en los intestinos y también puede causar complicaciones renales.
Sin embargo, Stephen Smith, microbiólogo en el Trinity College de Dublín, no conectado con Asklepios, justificó los métodos del hospital y manifestó dudas de que los antibióticos aceleren la liberación de toxinas, diciendo que no todos los antibióticos tienen el mismo efecto.
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Sospechan del primer caso de E. coli en Canadá
Las unidades médicas de la oriental provincia canadiense de Ontario se mantienen en alerta tras la aparición del primer caso sospechoso de infección con la bacteria E. coli en un viajero que estuvo en Alemania.
Los primeros exámenes médicos de laboratorio de un residente en la región de Peel, en el occidente de Toronto, resultaron positivos a toxinas de la bacteria, pero aún se espera la confirmación que deberá de darse en los próximos días.
Arlene King, jefa de la oficina de salud en Ontario informó la víspera a la prensa que el residente viajó a Alemania donde consumió ensaladas y a su regreso experimentó malestares que al ser diagnosticados se asemejaron a los del contagio por E. coli.
Por lo pronto el paciente ya superó la fase crítica y salió del hospital, sin embargo todas las unidades médicas están alertas ante posibles nuevos casos, dijo la experta según reportes de The Canadian Press.
