EFE
Bettina, un gibón de 32 años, lleva a su recién nacido en el regazo mientras se desplaza por el parque de Ramat Gan, en Tel Aviv (Israel).
Los gibones son expertos en el arte de desplazarse de rama en rama en distancias de hasta 15 metros y a una velocidad que puede llegar a alcanzar los 56 kilómetros por hora.