Sorpresa. El príncipe Guillermo saludó a algunas personas a las afueras de la Abadía de Westminster, ayer, en el último ensayo de la boda.
LONDRES, INGLATERRA.- El príncipe Guillermo y su esposa, Kate Middleton, se declararon muy conmovidos por las muestras de cariño que han recibido por su boda, que tuvo lugar hoy (a las 5:00 de la mañana, hora de México) con pompa y boato en la Abadía de Westminster.
"Ambos estamos encantados de que hayan podido unirse a nosotros para celebrar lo que esperamos sea uno de los días más felices de nuestras vidas", dijeron Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono, y Kate en un comunicado impreso en el programa oficial de recuerdos.
"El afecto mostrado por tantas personas durante nuestro compromiso ha sido increíblemente emocionante, y nos ha conmovido profundamente. Nos gustaría aprovechar esta oportunidad para agradecer a todos sinceramente su amabilidad", dijeron en el programa.
Ayer por la mañana, Middleton, de 29 años, junto con el hermano menor de Guillermo, el príncipe Enrique, quien ejerce de padrino, realizaron un ensayo final en la abadía, acompañados por parte de la familia de la novia, damas de honor y pajes.
Se supo que Middleton no pronunciaría la palabra "obedecer" en los votos hacia su futuro marido, y sí en cambio "honrar o amar".
OFRECE ISABEL II CENA A REALEZA EUROPEA Horas antes de la boda real de Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton, la monarca británica Isabel II ofreció una cena a los reyes y príncipes que llegaron de toda Europa para la gran celebración. El encuentro se realizó en el lujoso hotel Mandarín Oriental, sin la presencia de los novios.
Mexicano invitado a boda real
En la lista de los invitados de La Boda Real hubo un ramillete de reconocidas celebridades, pero el nombre del mexicano Carlos Gutiérrez apareció discreto en la lista, gracias a que se ganó el honor de asistir la boda entre el príncipe William y Catherine Middleton.
El mexicano residente en Londres y empleado de la Abadía de Westminster, la iglesia de construcción gótica en donde se celebró la Boda Real, obtuvo su invitación gracias a que se realizó una rifa entre los empleados de la iglesia para ser parte de este histórico enlace.
El trabajo diario de este invitado real es limpiar los objetos de la Abadía y estar pendiente de los servicios de la iglesia. Pero hoy, además de realizar sus deberes en la abadía, Carlos tuvo el privilegio de asistir a La Boda y a la fiesta del enlace Real.
