Hablar de crimen, por muy organizado que esté, ya no describe adecuadamente la realidad. Así inicia el editorial del diario español “El País”, el cual toma como eje el atentado al casino Royale, en Monterrey, donde 52 personas perdieron la vida.
Hablar de crimen, por muy organizado que esté, ya no describe adecuadamente la realidad. Así inicia el editorial del diario español “El País”, el cual toma como eje el atentado al casino Royale, en Monterrey, donde 52 personas perdieron la vida, para señalar que "incluso un atentado tan enloquecido y monstruoso tiene su explicación".
El ataque "apunta a una guerra entre narcos que se atacan en sus presuntos intereses económicos, al tiempo que tratan de poner al Estado de rodillas creando una imagen de ingobernabilidad ante la opinión que le obligue a negociar un alto el fuego, al amparo del cual el narco seguiría disfrutando en la impunidad de tan criminal sinecura".
Asegura que el futuro de la democracia en México dependerá de que "el Estado prevalezca contra el terror".
"Felipe Calderón ha reaccionado acusando a Estados Unidos de extrema lenidad, virtual indiferencia, ante el problema. El presidente ha exigido, pero por enésima vez, que cese "la criminal venta de armas de alto poder" a los cárteles, así como que se combata sobre el propio terreno el inmenso negocio de la droga en las ciudades del gran vecino.
"El presidente norteamericano Barack Obama ha respondido con la comprensión y sentimiento de rigor, pero sin planteamientos concretos para combatir el mal", agrega el editorial del diario español.
Afirma que "la lucha ya no es únicamente del Estado mexicano ni puede ser solución el envío de más agentes a Monterrey; la lucha es de la sociedad mexicana en su conjunto. Quien no denuncie, no actúe, no se oponga en la medida de sus posibilidades al cáncer del narcotráfico, estará por debajo de lo que en esta hora exige la nación".