El presidente Felipe Calderón adelantó que para la próxima reunión de líderes del G20, el 18 de junio de 2012, deben estar sentadas las bases para solucionar la crisis en la eurozona y evitar contagios, aunque para ello se tomarán decisiones costosas.
"Deben tomarse decisiones audaces, algunas de ellas costosas sin las cuales no habrá solución a la crisis que hoy enfrentamos", aseveró.
El mandatario ofreció una conferencia de prensa al término de la VI Cumbre de Líderes del G20, grupo que presidirá el mexicano a partir de diciembre próximo y para lo cual anticipó diálogo constante con los dirigentes del mundo a través de videoconferencias.
"México va a favorecer el diálogo franco, directo y en particular buscaré tener reuniones de carácter virtual a través de videoconferencias como las que pusimos en práctica antes de la COP16 y que explican buena parte de su éxito", anticipó.
Calderón precisó que el objetivo es "mantener contacto directo con líderes de todo el mundo varias veces antes de la próxima reunión en el mes de junio" en Los Cabos, Baja California Sur.
Una de las principales prioridades es recuperar la estabilidad económica para reiniciar el crecimiento.
"Hice votos porque antes del 18 de junio, antes de la próxima reunión del G20, ya se hayan tomado aquí en Europa las decisiones que todos sabemos son indispensables para resolver la crisis del Euro, aislar los efectos de esa crisis en economías como la italiana y la española y evitar el contagio sistémico y desde luego para descontar ya precisamente la parte de deuda griega que es simple y sencillamente impagable", aseveró.
