Los nueve cuerpos encontrados sin vida en la calle Lorenzo Garza del fraccionamiento San Ignacio de esta ciudad, el domingo 15 de mayo, en las proximidades de la entrada principal de la plaza de toros Alejandra, fueron identificados.
De acuerdo a información de la Fiscalía del Estado, la causa de muerte de las nueve personas fue asfixia por estrangulamiento.
Sus nombres son Gabino Romero Quinterio, de 45 años de edad; Julián Romero Romero Quintero, de 49 ; Ignacio Vizcarra Sánchez, de 23; e Inocente Romero Quintero, de 29.
Los cuatro tenían su domicilio en el poblado Las Adjuntas, municipio de San Dimas. Se trataba de tres hermanos y su cuñado.
De igual forma, Óscar Leyva Preceda de 40 años de edad, con domicilio en la colonia Héctor Mayagoitia; Cristian Jonathan Gallardo Gandarilla de 28 años de edad, con domicilio en el Fraccionamiento Bosques del Valle; Manuel Valenzuela Arana y Emilio Valenzuela Aguilar de 24 y 28 años de edad respectivamente, ambos con domicilio en la colonia El Saltito.
Asimismo, Miguel Gerardo Pasillas Gómez, de 36 años de edad, con domicilio en el fraccionamiento San Ignacio de esta ciudad.
Los familiares de los referidos coincidieron en desconocer las actividades que realizaban sus parientes y los motivos que pudieran existir para que los privaran de la vida.
Muere en persecución con militares
La madrugada de este martes, en calle Río Lerma de la colonia Valle del Sur de esta ciudad, fuerzas castrenses se percataron de la presencia de un vehículo sospechoso de la marca Volkswagen, línea Pointer, color azul marino, placas del estado de Durango. Al marcarle el alto para una revisión éste se dio a la fuga a la vez que sus ocupantes comenzaron a disparar contra los militares. Estos respondieron con disparos, resultando muerto José Luis Cassio Valles, de 38 años de edad.
Entre sus piernas se encontró un arma de fuego marca Colt, calibre 2.23 con el cargador ya desabastecido.
De estos hechos se logró la detención de Pedro Mancinas Corral, de 34 años de edad, con domicilio en la colonia Lucio Cabañas de esta ciudad. Del lugar de los hechos se levantaron siete casquillos percutidos calibre 2.23.
La practica de la necropsia de ley reveló la causa de su muerte se debió a una herida producida por arma de fuego en el tórax.
