La Arquidiócesis Primada de México criticó la falta de opciones educativas y laborales para los siete millones de jóvenes que en México no estudian ni trabajan, porque los convierte en una presa fácil de las propuestas de la delincuencia organizada, que busca reclutarlos.
En el editorial del semanario católico "Desde la fe", La institución eclesial que encabeza el cardenal Norberto Rivera Carrera, destacó la ausencia de programas gubernamentales que se ocupen de quienes no han tenido cabida en las preparatorias y universidades, pero tampoco en el ámbito laboral.
"Mientras que el crimen organizado perfecciona y extiende sus redes para captar el potencial de millones de jóvenes sin oportunidades, las políticas públicas para rescatarlos y promoverlos 'duermen el sueño de los justos'" cuestionó el editorial titulado "Jóvenes sin vacaciones".
El texto retoma estadísticas oficiales para describir la situación de los llamados "ninis" como alarmante, al señalar que 80% de las cárceles están ocupadas por jóvenes entre los 20 y los 35 años, y que 9 de cada 10 víctimas de delitos violentos son jóvenes.
De acuerdo con el editorial, sólo en cinco entidades del país existen algunos programas muy limitados para atender el problema: Chihuahua, Baja California, Tlaxcala, Guerrero e Hidalgo, y las demás, "algunas de ellas caracterizadas por su populismo rampante, no tienen acciones que traten de responder a esta gravísima situación".
El órgano informativo del Arzobispado destacó que el problema es de toda América Latina, pues de acuerdo con informes oficiales, en la región hay casi 40 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años con un futuro sombrío, pues ni estudian ni trabajan. Esa cifra corresponde a la cuarta parte de la población de ese grupo de edad.
"Se trata de la población juvenil más vulnerable, porque se encuentran en medio del ocio que los hace víctimas fáciles de vicios, en su búsqueda desesperada de una oportunidad de trabajo que no llega", alertó la Arquidiócesis.
Por esa situación, miles de jóvenes "se ven tentados a aceptar propuestas de la delincuencia organizada, que ofrece dinero a manos llenas a sabiendas que se corre el riesgo de perder la libertad o la vida, lamentó.
