Los obispos de Saltillo y de Torreón, Raúl Vera y Gerardo Alonso Garza, respectivamente encomendaron el proceso electoral de Coahuila a la Virgen de Guadalupe.
La Iglesia Católica en Coahuila demandó a candidatos y partidos políticos a no ser cómplices de la delincuencia y a no vender las campañas 'a lobos rapaces' en las elecciones para gobernador y diputados locales que se efectuarán el domingo 3 de julio próximo.
Los obispos de Saltillo, Raúl Vera López, de Piedras Negras, Gerardo Alonso Garza Treviño (conocido como "el Padre Loncho") y de Torreón, monseñor José Guadalupe Galván Galindo, establecieron en un pronunciamiento la diferencia entre "un buen pastor y un mal pastor" y encomendaron el proceso electoral de Coahuila a la Virgen de Guadalupe.
"Esta es la única manera de superar la terrible situación de violencia en que nos encontramos, de iniciar el único camino que nos conduce a la vida plena que nos ofrece Jesucristo, el Buen Pastor, y de recuperar, por el amor, la paz tan anhelada para Coahuila, para esta región noreste y para México", aseguraron.
"Encomendamos a nuestra Señora de Guadalupe el proceso electoral en el estado de Coahuila, para que se desarrolle dentro de un marco de respeto y dignidad de la ciudadanía, para que no sea causa de división entre partidos y grupos, sino que por medio de él nos integremos en la unidad por la búsqueda de la justicia, como un pueblo organizado para provecho de todas y todos sin excepción", dijeron.
"Exhortamos a los partidos políticos a no hacerse cómplices de la destrucción y muerte que afecta al estado, permitiendo que sus candidatos vendan las campañas a lobos rapaces".
También los invitamos a no realizar campañas destructivas del contrincante político, ya bastante fracturada está la sociedad por la violencia generalizada que padece, como para tener que soportar campañas llenas de agresiones y denuestos, de artimañas y descalificaciones, que provoquen resentimientos difíciles de superar por largo tiempo.
"A los partidos políticos corresponde en primer lugar frenar esa nefasta práctica; pero también a la ciudadanía le compete tomar conciencia de que no puede seguir haciéndose cómplice del comercio del voto", subrayaron Vera López, Garza Treviño y Galván.
El voto ciudadano en este proceso electoral es una oportunidad para empezar a corregir el rumbo de Coahuila y de México, pero debe ser emitido con responsabilidad crítica, honestamente y con libertad, sin obedecer a intereses obscuros y presiones de cualquier tipo, advirtieron.
Los prelados de la Iglesia Católica advirtieron también: "Prestarse a la compra venta del voto, trae como consecuencia que los funcionarios públicos que acceden a sus cargos por la vía electoral mediante la corrupción del voto, pasen a ser enemigos públicos de la nación y no servidores públicos de ella".
El pronunciamiento fue leído en conferencia de prensa conjunta por el padre Pedro Pantoja Arreola, responsable de la Comisión para la Construcción de la Ciudadanía, el padre Fernando Liñán de Pastoral Social y el obispo de Saltillo, Raúl Vera López.
