Libertad y respeto. Carrera, arzobispo primado de México, durante la tradicional misa en la Catedral Metropolitana.
La Iglesia Católica pidió respeto para quienes profesan otras creencias religiosas, "porque vivimos en un mundo plural donde debemos convivir con hombres y mujeres que tienen una fe, o no tiene una fe", reconoció el cardenal Norberto Rivera.
En su homilía dominical en la Catedral Metropolitana, el jerarca religioso afirmó que todo hombre debe ser respetado en su religión porque es un derecho inalienable.
"Así como respetamos la creencia de otros, pedimos a la sociedad y a las autoridades se respeten nuestras creencias, de los creyentes y no creyentes", pidió.
A los feligreses, el cardenal Norberto Rivera reconoció que hasta hace poco toda la familia profesaba una sola fe, y ahora vemos en este núcleo familiar hay varios integrantes que no comparten la misma fe, incluso esto sucede también en el trabajo, en la escuela y en la comunidad.
Mencionó que la libertad religiosa es un derecho fundamental y no es un privilegio para tal o cual religión.
"El respeto y el reconocimiento que nos merecen nuestros hermanos de otras religiones nos debe llevar también a proclamar y a proponer con toda libertad y honestidad nuestra fe y nuestras convicciones religiosas. El mismo respeto y reconocimiento debemos exigir a los demás para nuestra iglesia, nuestra fe y nuestras tradiciones", expresó.
"En ese sentido, el antisemitismo debe ser rechazado totalmente y debemos reconocer el gran patrimonio espiritual que los cristianos tenemos en común con los hebreos. Pero, agregó, no podemos quedarnos en el reconocimiento sólo de los hermanos judíos, sino también debemos reconocer a los millones de hermanos musulmanes, budistas e hinduistas, ya que nuestra iglesia reconoce y acepta todo lo que hay de verdadero y santo en estas religiones", argumentó.
IGLESIA PIDIÓ TREGUA
En la semana la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) exhortó a los grupos de la delincuencia organizada a permitir a la feligresía venerar las reliquias del Papa Juan Pablo II, que llegarán el día 17 a México, y para que su recorrido por 91 puntos del país se lleve a cabo en paz, orden y armonía.
El coordinador de la Peregrinación de las Reliquias del beato Juan Pablo II, Manuel Corral Marín, exhortó: 'apelamos a que estas personas, los de las bandas de delincuentes, de la delincuencia organizada, tengan este respeto. Sabemos que a veces no lo hay, pero que lo hagan por un Papa que quiso tanto a México'.
La CEM indicó, además, que la veneración de las reliquias será una oportunidad para que los bautizados y las personas de buena voluntad alcancen el perdón y la misericordia de Dios.
'Nos encomendamos al Señor para que este acontecimiento renueve nuestros corazones, nos aliente al bien, al trabajo honesto y responsable, que su testimonio y ejemplo nos lleve a propiciar relaciones armónicas entre la familia, las instituciones y la sociedad'.
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