'Nunca había sido tan feliz como ahora, estoy esperando que llegue el miércoles para jugar', afirmó Tomic.
El joven australiano Bernard Tomic, que con 18 años se plantó hoy en los cuartos de final de Wimbledon, dijo al finalizar su encuentro frente al belga Xavier Malisse (6-1, 7-5 y 6-4) que no tiene intención de "parar ahora".
"Creo que ahora realmente he aprendido cómo debo jugar, y voy a hacerlo lo mejor posible el miércoles en cuartos", afirmó en una rueda de prensa el australiano, que se enfrentará al número dos del mundo, Novak Djokovic, si el serbio soluciona su partido frente al francés Micheal Llodra.
Tomic, que se deshizo en tercera ronda del sueco Robin Soderling (quinto cabeza de serie), y que con su actuación en este campeonato desbanca a Lleyton Hewitt del número uno australiano después de más de diez años de reinado, dijo que su despegue en el circuito profesional "tenía que suceder en algún momento", aunque subrayó que nunca pensó que "estaría aquí la segunda semana".
"Estaba acostumbrado a jugar contra 'juniors', era muy bueno allí y gané unos cuantos torneos. Pero en 'junior' los jugadores fallan bastante, al contrario que aquí, así que pensé: si quieres jugar contra éstos tienes que relajarte y hacerlo como en los entrenamientos", reflexionó.
"Nunca había sido tan feliz como ahora, estoy esperando que llegue el miércoles para jugar", afirmó Tomic, que señaló que la victoria en la tercera ronda sobre Soderling y la de hoy frente a Malisse son "muy distintas" entre sí.
Para el australiano, en los dos casos se trata de "un logro increíble", aunque subrayó que, para el partido de hoy, se había preparado "realmente bien" y "quería ganar" a toda costa.
Tomic, que empezó a jugar a los "siete años y medio", es de padres bosnio-croatas, nació en Stuttgart (Alemania), y se trasladó a Australia con apenas dos años.
"Ahora no me arrepiento de haber empezado a jugar la tenis", dijo Tomic, quien señaló que mantiene una relación "realmente buena" con Djokovic, probablemente su rival en cuartos.
"Es uno de los chicos más simpáticos del circuito. Creo que me respeta, aunque yo tengo mucho más respeto por él dado que, claro, ha jugado a un gran nivel los últimos cinco años y ahora está cerca de ser el número uno", apuntó el australiano, que habla con el número dos del mundo en serbo-croata.
Explicó que estuvo peloteando durante un entrenamiento con Djokovic antes del campeonato, y que el serbio le "destrozó".
"Las cosas no pintan bien para mí en ese sentido, pero espero que me destrozara entonces y no lo vuelva a hacer el miércoles", dijo Tomic.
