Incubadoras; nace un negocio
La relación de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) con las universidades es muy reciente. No alcanza los 10 años de vida.
Inició por la necesidad que ambas partes tenían, al buscar por un lado la profesionalización y por el otro la vinculación social y económica con un sector vital para el país.
Las pymes se acercaron a las instituciones educativas, las cuales empezaron a ofrecer su "know how" a través de su primer producto ideado específicamente para ellas que fue la incubadora de negocios, en donde el empresario busca apoyo técnico académico para iniciar un negocio.
Las principales universidades del país tanto públicas como privadas cuentan con espacios de vinculación y apoyo a las Pymes.
Una de las primeras prácticas se hace desde las aulas con los alumnos, se trabajan sobre casos reales.
La otra es el contacto directo del empresario con las universidades, en donde se acercan a las distintas áreas que tienen en sus facultades o divisiones dedicadas a Pymes y piden el apoyo.
Los consultores universitarios apoyarán y solventarán directamente los problemas o necesidades que señalen los emprendedores, pueden ser administrativas, comerciales, legales o de cualquier área de la empresa.
De tres años a la fecha, se registra un boom de incubadoras y empresas que busca superar la barrera de los dos años de vida promedio de las pymes en México.
Rafael Castillo, director de la incubadora de alta tecnología y aceleración de empresas del parque empresarial del Tecnológico de Monterrey Campus Santa Fe, explicó que una incubadora de negocios es un lugar en donde un emprendedor trae una idea de negocio.
"Con esa idea le acercamos un tutor que lo va llevando por todo un proceso de elaboración de un plan de negocios, en este proceso se les ofrece asesoría especializada en temas como mercadotecnia, imagen, desarrollo tecnológico, finanzas, contabilidad".
El académico agregó que depende del giro de la empresa, pero el objetivo es que la compañía al final del proceso, se constituya, genere empleos y apoye a la economía de la zona donde nace.
"Aquí pueden ingresar, alumnos, ex alumnos y personas de la comunidad externa en general", aclaró.
Por otro lado, dijo, las aceleradoras de empresas operan cuando un negocio ya está en un proceso muy avanzado de incubación o post incubación o bien cuando las empresas tienen dos años o más de antigüedad y con un crecimiento en ventas constante.
Estas empresas son denominadas por la Secretaría de Economía (SE) como gacelas, a las cuales se les acerca una asesoría muy especializada.
Se inicia el proceso con un diagnóstico, se elabora un plan de acción o de aceleración para detectar sus áreas de oportunidad e intervenimos para potenciar su crecimiento tanto en facturación como en creación de empleos, los proyectos de emprendimiento, de incubación y aceleración.
Óscar Fonseca, director de la licenciatura en creación y desarrollo de empresas del Tecnológico de Monterrey, campus Santa Fe, aclaró que los empresarios deben de tener cuidado al momento de escoger una incubadora o aceleradora.
"Es importante reconocer si la incubadora o aceleradora realmente es efectiva, debemos conocer sus resultados previos, cuantitativos y cualitativos, hay que comparar eficiencia contra efectividad y conocer su historial sobre empresas de éxito", advirtió.
La UNAM y el Politécnico Nacional han desarrollado este tipo de apoyos y consultorías.
La UNAM por ejemplo desde hace más de cinco años, contó primero con el Centro de Excelencia Empresarial (Cenexe) dependiente de la Facultad de Contaduría y Administración, de éste se desprendió el Centro Nacional de Apoyo a la Pequeña y Mediana Empresa (CENAPYME), cuyo objetivo es apoyar a las PyMES en el desarrollo de sus habilidades directivas, en la identificación y desarrollo de sus proyectos estratégicos.
DE LA ESCUELA AL PROYECTO DE VIDA
El negocio inició como una tarea escolar y se convirtió en su proyecto de vida.
Arturo Smith López, es director de tecnología de su propia empresa de iluminación LiteMex Iluminación S.A. de C.V., la cual desarrolla, fabrica y comercializa lámparas inteligentes a base de tecnología Light-Emitting Diode (LED, por sus siglas en inglés). Smith es egresado de la carrera de Ingeniería Electrónica y Comunicaciones del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey Campus Santa Fe.
Elidé Rangel de comunicación y relaciones públicas del Tec Campus Santa Fe, cuenta que el interés de Arturo por conocer lo último en tecnología, "lo llevó a considerar que, el entonces poco conocido LED, podría ser un excelente negocio para crear artículos de iluminación, fue así como su proyecto comenzó a transformarse en algo más que un deber de clase".
El proyecto, que demostró ser viable y sustentable, tuvo aceptación entre sus compañeros de clase, lo cual eso lo animó para participar en el Congreso Internacional de Emprendedores 2007 en la ciudad de Toluca, Estado de México.
"No teníamos nada que perder, en el Congreso nos enfrentamos contra varios países de Latinoamérica, con proyectos realmente sorprendentes, pero por fortuna el veredicto salió a favor nuestro, lo cual sentó así las bases de lo que sería LiteMex Iluminación S.A de C.V", planteó.
Smith López aseguró que "uno trae las ideas volando, pero en la incubadora te ponen los pies en la tierra, cada semana nos sentábamos para pulir el proyecto, definir objetivos y delimitar sectores. Uno de los aprendizajes que más me dejó la incubadora fue trabajar con orden, además del apoyo para obtener financiamiento externo", aseguró.
Elidé Rangel, relató que "uno de los momentos más difíciles dentro del proceso de la empresa de Arturo, fue cuando consiguieron un financiamiento con Capital Semilla el cual tuvo que rechazar debido a que la empresa se había quedado sin socios y tuvo que comenzar de cero nuevamente", afirmó.
Emprender, para Arturo, le ha brindado grandes satisfacciones tales como ver la evolución de la empresa y atestiguar su adaptación al avance tecnológico.
"Empezamos haciendo iluminación para bares, antros y restaurantes, posteriormente adaptamos esta tecnología para el uso del hogar; ahora estamos muy interesados en la parte de publicidad y hemos trabajado para grandes compañías".
En comparación con el foco normal, el LED ahorra 80% de energía, es capaz de generar 6,000 colores distintos y proporciona a las lámparas una vida de 80,000 horas.
Empujan negocios
Algunas instituciones de educación, de varios niveles, han tomado el camino de contribuir al proceso de desarrollo del país aportando un insumo muy importante; el conocimiento.
En diferentes entidades del país se han generado políticas públicas para apoyar este proceso; sin embargo, como la experiencia nos enseña, lo que ocurre por decreto, generalmente es de vida corta.
La contribución de las universidades, cuando se tiene la vocación de ser parte activa e importante en el crecimiento y desarrollo de la sociedad, es no sólo relevante, sino que se genera un proceso continuo y permanente.
El día de hoy hay instituciones que han creado la infraestructura conveniente, las relaciones con las dependencias de los gobiernos federales y estatales, y los apoyos para que quienes crean el conocimiento, tengan la oportunidad para vertirlo en una relación con organizaciones que pueden estar en una etapa embrionaria o en otra diferente que requiere apoyos correspondientes.
Los esfuerzos de apoyar a la creación, desarrollo, crecimiento, estabilización y en ocasiones, conversión de las empresas, siempre será una opción que genere beneficios por encima de los costos derivados de los flujos de efectivo invertidos, se estará creando una cultura que trasciende la necesidad inmediata.
Las incubadoras que se han instalado en las universidades son espacios que permiten a los emprendedores, algunos de los cuales son alumnos (as) de la universidad, adquirir o reforzar sus perspectivas respecto a lo que en un momento inicial consideraban como la "idea" que intentaban perseguir.
Estos emprendedores (as), se benefician de tener una perspectiva multidisciplinaria que incluye no sólo los aspectos relacionados con el producto o servicio implicado, sino también aquellos elementos relacionados con el mercado, la gestión, y por supuesto las operaciones y el financiamiento.
También como lo comente arriba, existen apoyos para organizaciones que ya están en etapas posteriores al lanzamiento, y que requieren de una contribución que los impulse hacia el crecimiento, o consolidación en sus mercados, a fin de poder capitalizar las ventajas que han creado.