El gobierno alemán analiza indemnizar a los familiares de las víctimas de la violencia de extrema derecha, según dio a conocer hoy la ministra de Justicia liberal, Sabine Leutheusser-Schnarrenberger.
El Ministerio de Justicia informó que estudia otorgar una indemnización de diez mil euros a los familiares de los ciudadanos de origen turco y griego que fueron asesinados por la célula neonazi NSU, descubierta hace dos semanas.
Se trata de nueve víctimas en toda Alemania, asesinadas entre 2000 y 2006, cuyos familiares podrían tener derecho a dicha suma de dinero, en lo que la ministra describió como una 'señal de solidaridad'.
'Una indemnización económica no reparará el daño sufrido', dijo Leutheusser-Schnarrenberger, tras aclarar que se servirá de un fondo especial de su Ministerio para este proyecto.
Unos 15 días después del descubrimiento de una célula terrorista llamada Nationalistischer Untergrund (Resistencia Nacionalista NSU), formada por unos tres integrantes y con base en la ciudad oriental de Zwickau, el país sigue conmocionado.
La canciller federal Angela Merkel mencionó el tema en su videomensaje semanal y expresó el deseo de que los hechos, 'puedan ser aclarados cuánto antes' ya que son 'una verguenza para el país'.
Mientras tanto emergieron este lunes nuevos detalles en el marco de la investigación policial de la célula NSU, a la que se considera además responsable del asesinato de una mujer policía, Michéle Kiesewetter, en 2007.
Justamente acerca de este asesinato, la policía logró nuevas evidencias. El homicidio de esta agente en Heilbronn pudo no ser casual, hay nuevas pruebas de que el trío tenía con la mujer conexiones personales, por lo que pudo tratarse de una ejecución.
La información, que fue dada a conocer este día por el presidente de los servicios de seguridad del Bundeskriminalamt (BKA), Jörg Ziercke, añadió intriga a una trama donde ya nada es lo que parece.
En particular, los medios alemanes especularon acerca de una muy probable conexión entre el grupo y el Servicio de Protección de la Constitución, un servicio de seguridad doméstico.
Estas informaciones no fueron confirmadas por ninguna sede oficial, pero quedó claro que las responsabilidades de este servicio de seguridad serán también objeto de investigación, ya que una serie de negligencias permitieron al grupo seguir actuando durante 13 años.
Frente a las continuas filtraciones de informaciones acerca de la serie de asesinatos del grupo terrorista, el ministro del Interior, Hans Peter Friedrich, presionó este lunes para volver a repartir las competencias en la lucha contra el extremismo de derecha.
'Tenemos que asegurarnos de que, tal y como con el terrorismo islámico, el Servicio Federal de protección de la constitución mantenga una dirección clara', dijo en Berlín.
Hasta ahora, las divisiones locales del Servicio de Protección de la Constitución elegían según su criterio cuáles informaciones retransmitir a otros estados o al servicio federal.
Friedrich consideró que en este sistema se encuentran las fallas que permitieron dejar escapar el grupo durante años y prometió cambios estructurales para que la situación no se vuelva a repetir.