Digo. Desde el sábado un grupo de estudiantes se integró al movimiento de indignación mundial, hoy acampan afuera de la BMV.
Jóvenes que participaron ayer en la protesta de "indignados" en el Monumento a la Revolución instalaron un "plantón" frente a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), donde un maestro de la UAM mantiene una huelga de hambre desde el 11 de octubre. Los alrededor de 40 jóvenes, egresados de diversas universidades públicas del país, dijeron que el campamento estará de manera indefinida, aunque realizarán turnos, pues no todos pueden estar ahí las 24 horas.
"Pienso estar viniendo en las tardes, aunque sea un tiempo, y los fines de semana pienso quedarme aquí a acampar. "No queremos que esto se vea vacío en ningún momento", afirmó Arturo España, de 23 años, egresado de Ciencias Políticas de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.
España junto a Francisco Félix, de 23 años, estudiante del Colegio de México, informan a los ciclistas, patinadores y corredores de Paseo de la Reforma sobre el motivo del movimiento. "El Movimiento de los 'indignados' ya llegó a México", afirmaron a través de un micrófono en mano.
Almendra Ortiz, socióloga de 26 años, aseguró que hasta el momento el movimiento se ha organizado bajo el sistema de asambleas y se han conformado algunas comisiones para la comida, mantener orden en el campamento y medios de comunicación.
"Ha sido complicado (la organización) porque en todos los movimientos divergen diferentes opiniones, discursos, pero lo que ha sobresalido es una misma intención, un mismo hartazgo sobre las cosas y creo que al final de cuentas se ha unificado", afirmó.
Durante una conferencia de prensa que ofrecieron junto al Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana, se informó que el profesor Edur Velasco exige con su ayuno que se destine el 2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) a las universidades públicas del país.
En tanto, los jóvenes reiteraron su inconformidad contra el sistema económico actual. "Somos el 99 por ciento contra el 1 por ciento. El sistema de producción capitalista se alimenta de la acumulación, del despojo y la explotación. Esta etapa de la crisis mundial del capitalismo ha llevado a la humanidad al borde del precipicio", comentó una joven del movimiento.
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