El estado de Carolina del Sur pidió el jueves a un juez que permita que entre en vigencia el próximo mes su nueva ley de inmigración mientras la Corte Suprema considera la ley de Arizona, que es casi idéntica, dijeron el jueves fuentes judiciales.
El Departamento de Justicia y grupos defensores de los derechos civiles pidieron a una corte federal en Charleston que impida la entrada en vigencia de la ley el 1 de enero. Fue convocada una audiencia para el lunes.
En una moción presentada el jueves, la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, y el procurador estatal Alan Wilson, dijeron que el estado se opone al bloqueo de la ley y que un fallo de la Corte Suprema sobre la ley de Arizona aclarará la mayoría de las objeciones a la ley.
La norma, similar a las de Alabama, Utah, Indiana y Georgia requiere que la policía verifique el estatus inmigratorio de toda persona detenida por cualquier motivo.
La Corte Suprema acordó esta semana revisar los fallos de las apelaciones federales que bloquearon varios aspectos de la ley de Arizona.
La Casa Blanca sostiene que regular la inmigración es un derecho exclusivo del gobierno federal, y no de los estados.
Carolina del Sur sostiene que el caso de Arizona y un caso de Medicaid — el seguro médico de los menesterosos — de California, que la Corte aceptó considerar igualmente, aclarará la Cláusula de la Supremacía — un artículo de la Constitución según la cuan la ley federal es la más importante del país y tiene precedente sobre la legislación estatal.
"Un fallo de la Corte Suprema en Arizona aclararía la mayoría de las objeciones" en el caso de Carolina del Sur", escribió Wilson en la moción.
"Carolina del Sur tiene derecho a poner en vigencia esta ley y protegerse mientras esta importante cuestión es considerada por el máximo tribunal del país", añadió.