El líder de la Iglesia de la Santa Muerte, David Romo Guillén, quien se encuentra detenido por su vínculo con la banda de secuestradores de 'el Aztlán', intentó negociar su libertad a cambio de revelar nombres de personas vinculadas con plagios, robos y otros ilícitos.
En entrevista, el titular de la Fiscalía Antisecuestros de la Procuraduría general de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Oscar Montes de Oca, señaló que el obispo de la referida congregación insistió en que se le dejara libre, aun después de haber confesado en su declaración su vínculo con los plagiarios.
'A mí me comentó en lo particular que estaba en la mejor disposición de ponernos a mucha gente que se dedicaba al robo o al secuestro, todo a cambio de que se le dejara libre', apuntó el fiscal.
Montes de Oca hizo énfasis en que la procuraduría capitalina no negocia con presuntos delincuentes ni les ofrece nada a cambio, toda vez que el Código Penal capitalino no contempla ningún tipo de figura relacionada con testigos protegidos o colaboradores.
Aclaró, además, que de momento sólo existen elementos de prueba para proceder penalmente en contra de las nueve personas de la banda de 'el Aztlán' que se encuentran arraigadas.
Descartó que exista evidencia para investigar o detener a otros integrantes relacionadas con el culto de la Santa Muerte, e insistió en que no se investigan creencias sino solamente denuncias y hechos.
Adelantó finalmente que será la próxima semana cuando la PGJDF ordene el levantamiento del arraigo para los nueve integrantes de este grupo delictivo, y solicite su orden de aprehensión por delitos diversos, entre ellos secuestro, extorsión y privación ilegal de la libertad.
En tanto, autoridades de la PGJDF indicaron que en las últimas horas se han logrado establecer otros casos con los que estaría relacionado el grupo delictivo, entre ellos la extorsión a un diputado federal del PRD por el estado de San Luis Potosí.
