Inversiones. La inauguración de una planta de ensamble de Daimler en Saltillo, Coahuila.
Aunque reconocen que la inseguridad y la corrupción son temas que les preocupan, los empresarios del país mantienen sus inversiones y sólo cambian la manera de hacer negocios.
Al presentar el estudio Perspectivas de la Alta Dirección en México en 2011, en el que participaron 500 líderes de todos los ramos industriales en el país, el socio a cargo de la Práctica de Impuestos Corporativos de KPMG, Rubén Dávalos, dijo que la corrupción, los robos y las amenazas son los problemas que más impactan a los negocios.
Detalló que a 43 por ciento de los líderes empresariales les afecta la corrupción, a igual proporción los robos, las amenazas a 32 por ciento, y el fraude a 24 por ciento, situación que -dijo- ya comienza a ser un factor de preocupación para el sector. Respecto a la forma en que la Iniciativa Privada percibe que la inseguridad afecta su economía empresarial, mencionó que 61 por ciento considera que pese a que se redujeron las inversiones nuevas en el país, tampoco se suspendieron; "no se está parando la actividad económica, se está cambiando la forma de hacer negocios".
Aunque no hay una salida de capitales o de detenimiento drástico de inversiones, el problema sí impacta en cuanto a percepción, pues ejecutivos internacionales ya "no están viniendo al país", comentó por su parte el socio director de Industrias y Mercados de KPMG, Roberto Cabrera.
Agregó que esos directivos toman decisiones vía telefónica y a través de otros medios de comunicación, lo cual tiene un impacto, aunque se aprecia recuperación en estos rubros.
En este sentido, el socio a cargo de la Práctica de Asesoría de KPMG, Víctor Esquivel, expuso que todos los empresarios llevan a cabo sus planes de expansión con mayor cautela por cuestiones de percepción.
Indicó que las entidades donde se observan oportunidades de inversión son Veracruz, Jalisco, Nuevo León (entidad que pasó de 37 por ciento en 2008 a 16 por ciento en 2011), Guanajuato, estado de México, Distrito Federal, Chiapas y Querétaro.
Respecto a las principales variables que México requiere para elevar su competitividad, los líderes empresariales consideran, en un 82 por ciento, que el combate a la corrupción es el factor más importante, seguido de la seguridad pública con 74 por ciento y 54 por ciento opina que se requiere estabilidad económica.
De acuerdo con el estudio de la consultora KPMG, 81 por ciento de los participantes considera que México no ha salido de la crisis financiera y 19 por ciento opina que sí; mientras que 49 por ciento de ellos estima que la recuperación llevará dos años o menos y 51 por ciento tres años o más.
En ese sentido, Rubén Dávalos consideró que en esta encuesta hubo mejor percepción en la actuación del Gobierno Federal sobre la manera de afrontar los efectos de la crisis financiera, al pasar (en una escala de 1 a 10) de una calificación de 4.98 en 2010 a 5.95 en 2011.
En cuanto al régimen fiscal en México, los empresarios dieron una calificación de 4.35 para este año, mejor a la de 2010 de 3.45, pero "hoy al igual que el año pasado seguimos estando reprobados".
