Disparo. La bala de una pistola calibre 45 le atravesó el cráneo. EL SIGLO DE DURANGO
Durango
Hacía días que Jesús Emiliano Jechen Sánchez, de 23 años de edad, estaba sumido en una profunda depresión por la falta de empleo; eso y el consumo de drogas lo llevaron al suicidio.
Emilio Jechen regresó de un viaje la tarde del viernes, al tocar la puerta de su casa ubicada en el fraccionamiento Los Fuentes de la capital duranguense se percató de que su hijo no le abría, así que pidió permiso a los vecinos para brincarse la barda e ingresar a su domicilio.
Pero al entrar percibió un olor fétido que provenía del interior de la casa, concretamente de la recámara de su hijo; al entrar se encontró con el escenario que temía: su hijo yacía tendido en el piso en medio de un charco de sangre y a su lado había una pistola.
Elementos de la Fiscalía General del Estado arribaron al lugar para comenzar con las investigaciones, mientras que el Agente del Ministerio Público llegó para dar fe de los hechos; luego de las pruebas periciales se confirmó que la muerte de Jesús Emiliano fue un suicidio, el número 18 ya en lo que va del año.
Se estableció que la causa de la muerte del joven se debió a una herida producida por proyectil disparado por arma de fuego que le atravesó el cráneo. El arma con la que se disparó fue una pistola calibre 45.
El padre del hoy occiso detalló que la última vez que habló con su hijo fue el miércoles pasado, notándolo deprimido por falta empleo.
Consumo
Entre los datos que aportó el padre de Jesús Emiliano a los elementos de la Fiscalía estatal, destaca que su hijo era consumidor de drogas.
Crecimiento
En lo que va del año se han registrado 18 suicidios, lo que arroja un promedio de 2.5 personas que se privan de la existencia por semana.