LA COLUMNA DEL PERRO
No pensé que la vida fuera así, recién después del mes que nací, mi mamá ya no volvió al lugar que nos parió a mis hermanitos y a mí. El terreno baldío en que nacimos estaba retirado de las casas, y por más que lloramos de miedo, de hambre y de frío todos, nadie nos escuchó.
Cuando la sed y el hambre nos caló, nos salimos del agujero que nuestra madre había hecho entre unas ramas y mis hermanos y yo guiados úicamente por el instinto de supervivencia nos atrevimos a salir tomando cada quien por rumbos diferentes.
No sé exactamente cuánto tiempo pasó y yo por más que caminé y lloré no encontraba compañía, mucho menos quien me diera agua y comida. Por suerte para mí encontré por ahí vagando algunos restos de comida y un poco de agua que bebí de un charco.
No sé cuánto tiempo anduve por ahí, no sé si fueron días o semanas, y siempre que veía alguna persona tratando de ganarme su confianza para que se compadeciera de mí y siempre obtuve maltrato pues me decían que era un "perro de la calle".
Cada vez estaba más "flaco" y débil pues sólo comía cuando tenía suerte de encontrar algo por ahí. Mi piel empezó hacerse áspera, el pelo se me desprendió, me rascaba mucho hasta sangrar, y al insistir en acercarme a las personas peor rechazo tenía de ellas al grado de arrojarme piedras o agua para que me alejara y no me quedara cerca de sus casas.
El tiempo pasó y el hambre, la sed y el clima y el cansancio llevó mi vida al límite de sus fuerzas y cuando yo me abandoné a mi suerte sólo pensaba, que provenía de una madre que también era de la "calle" y que seguramente corrió la misma suerte que yo y por eso no volvió y el único crimen que cometimos es que alguna persona inconsciente nos abandonó en la calle por haber cometido el delito de no ser de raza, sólo por ser criollos.
Casi inconsciente escuché la voz de un niño quien le decía a su mamá que lo traía de la mano, mira mamá éste es el perrito que te platiqué, vamos a llevárnoslo y alimentarlo, tú nos enseñaste a tener piedad del desvalido. La mamá ante semejante argumento no tuvo más que asentar con la cabeza en forma positiva, y acto seguido me levantó y yo tenía la seguridad que a partir de ese momento mi suerte cambiara para bien, así como el Karma de ese niño de su mamá, pues bien sabemos que se cosecha lo que se siembra.
Y ahora para terminar una gota de filosofía:
Sólo basta una sola cosa para que los malos ganen, y es que los buenos no hagan nada.
Miguel_daviladavila@hotmail.com
ADÓPTANOS
"Gualas & Coquis"
Gualas: (izquierda), macho, dos años, esterilizado, tranquilo, simpático, juguetón, excelente compañero, ando en busca de un hogar donde quieran mi compañía.
Coquis: (derecha), hembra, un año, esterilizada, alegre, juguetona, gran compañera... adóptanos!
Anímate no lo pienses más, adopta un amigo leal e incondicional sin costo alguno, sólo envíanos un correo a: miguel_daviladavila@hotmail.com, o comunícate al 871-1201787. El correo y teléfono anterior es para personas interesadas en adoptar una mascota, no contamos con instalaciones físicas para dar albergue a animalitos (no hay refugio). Esteriliza a tu mascota, no olvides llevar al día el esquema de vacunación de tu mascota. Identifícala con una placa que contenga información básica en caso de extravío, no permitas que se convierta en una estadística más de muerte en la calle. Si por alguna razón tienes una mascota no deseada no la abandones en la calle, no la condenes a muerte si ésta no logra encontrar un lugar seguro donde no la agredan, donde pueda protegerse del clima, y donde pueda encontrar agua y alimento. Demos el ejemplo a nuestros hijos, tomemos decisiones responsables.