Señoras y señores: se supone que tendríamos que hablar de la Copa América, un torneo bizantino y viejo, pero permítanme antes tocar un tema que ha estremecido a los medios ingleses y estadounidenses, y que bien puede reproducirse en otros países.
Qué hacemos cuando una o 2 personas pueden controlar más del 80 por ciento del mercado de las empresas de comunicación, llámese televisión abierta, cable, satélite, Sky, cine, revistas, servicios comerciales y muchas otras, sin contar que a algunos les fascinaría meterse a la prensa y además tener presencia internacional como se tiene sobre todo en EU, con los migrantes mexicanos.
La concentración de medios es poco saludable y muy peligrosa, esto a raíz de lo que ha pasado con el periódico News of the World, editado en Inglaterra y que ha trascendido las leyes más elementales de la cordura. Y estamos hablando de Inglaterra y Estados Unidos, 2 países de gran competencia periodística y televisiva, imagínense en México donde Sky en un mes nos ha recetado 150 partidos de futbol, monopolio absoluto, como monopolio de más futbol, con la Copa América.
Argentina ha provocado una formidable desilusión y frustración. Para mí, el futbol argentino está en decadencia de entrenadores y de jugadores de alto nivel, sobre todo en la línea defensiva, y aun así Messi demostró que sigue siendo el mejor del mundo en un equipo rodeado de egos impresionantes. Cómo estaría que los uruguayos le cantaban "Messi es español". Uruguay demostró que es un equipo sólido, organizado, con un futbol precavido, hasta austero, pero con eso tuvo suficiente y con 2 excelentes futbolistas, Forlán y Suárez, es favorito para ganar.
Brasil es demasiado joven y se encontró con un muro y un portero que parecía de goma, Justo Villar detuvo todo. No sé cómo se sienta el argentino Martino que dirige a Paraguay, pero los paraguayos juegan espantoso, desagradable a la vista, totalmente defensivo, pero aguantan en serio, y miren que Brasil atacó y atacó, creció y no pudo con él.
Venezuela ya no es una sorpresa, es un equipo bien dirigido por el técnico Farías y acabó con las esperanzas de Chile, Alexis Sánchez apareció poco. Y Perú, con Markarián, trabajando intensamente y dando cátedra de humildad, pasó sobre la altiva Colombia.
Todo puede pasar en la Copa, donde los grandes ya se fueron, a excepción de Uruguay, que ha hecho un buen trabajo. Hoy no hablaremos más de Neymar, Robinho, Ganso; Messi, Agüero, Higuaín, sino de la formidable defensa que propuso Uruguay, de su portero Muslera, que tuvo una actuación destacadísima, de la especialidad de los uruguayos, garra, entrega y coraje, y de un Perú que tiene jugadores inteligentes que le pueden dar una sorpresa. Pero sigo pensando que el equipo de Tabárez es el gran favorito.
Uruguay puede monopolizar la Copa América, palabra indeseable para los medios de comunicación.
Jrfernandez@reforma.com