Despúes de los goles anotados en el Estadio Torreón, Julio Gómez se convirtió en el estandarte de la joven Selección Mexicana, que este día disputará la final del Mundial Sub 17 ante Uruguay. (Jam Media)
Se necesitan héroes para levantar el trofeo del campeón del mundo. "Todos lo somos", exclaman en el "mini" Tri, con Julio Gómez como el exponente máximo. Por eso toda la Selección Nacional Sub-17 se puso un "turbante" en la cabeza para honrarlo, porque este domingo la gloria los espera.
La inspiración del combinado verde juvenil proviene de las vendas que protegen la cabeza del valiente. Por eso sus compañeros se sienten como Gómez. Quieren contagiarse de su espíritu guerrero para ser campeones del mundo juveniles por segunda vez en la historia del balompié mexicano.
Cita con Uruguay para buscar el trono del orbe. La Copa del Mundo le ha dejado espacio a la Selección Nacional para añadir historias de éxito.
Así como el volante del Pachuca tuvo su dosis de salvador ensangrentado ante Alemania, otros elementos nacionales han colaborado con sus hazañas para tener a México en la antesala de la gloria.
La tarde de este domingo se requieren las barridas de Antonio Briseño, los desbordes mágicos de Giovani Casillas, las incontables atajadas de Richard Sánchez, la exactitud de los trazos de Jorge Espericueta, los goles de Carlos Fierro y las gestas de Gómez. Todos ellos dicen al unísono: "Todos somos héroes y queremos el campeonato".
"La verdad que hemos trabajado muy fuerte, creo que cualquiera que entre puede hacer un gran trabajo o el que inicie lo puede hacer bien y la verdad creo que todos somos unos héroes", presume Giovani Casillas, el revulsivo favorito del técnico nacional, Raúl Gutiérrez.
Fierro ha sido el pilar en el ataque mexicano. Sus tantos han sido claves y en el momento justo para teñir los partidos de verde, blanco y rojo.
El actual líder de goleo del "mini" Tri explica que sus anotaciones son producto de la labor de equipo, porque sin los demás, no podría ser el artillero predilecto de la afición.
"Todos hemos trabajado a la par, todos hemos ido demostrando a lo largo del Mundial, con todas nuestras cualidades como las de mi compañero Julio Gómez. Todos trabajamos para lo mismo que es ser campeones", considera el canterano del Guadalajara.
Ante los alemanes, Jorge Espericueta con un gol olímpico en el estadio Corona abrió la esperanza para que llegara la hazaña del 3-2 y el pase a la final de esta tarde en el Estadio Azteca.
El camiseta 7 del Tricolor admite que en este momento la motivación en el seno nacional es su herido compañero, pero que todos en la escuadra mexicana trabajan con el propósito de terminar el duelo ante Uruguay.
"Mañana (este domingo) vamos a estar todos motivados. El secreto es que no sólo uno brilla, sino que hemos estado funcionando en equipo ahorita le estuvimos haciendo bromas a Gómez, que es la motivación él y Jair Zacarías (quien se perdió la Copa del Mundo por una fractura de tibia y peroné) y estamos muy contentos", afirma el contención de los Tigres.
Una de las figuras mexicanas es quizá el elemento más silencioso del equipo. El portero Richard Sánchez jamás hace un aspaviento de más y nunca se le ve como el organizador del relajo en el seno del juvenil conjunto nacional. Pero también ha sabido llenarse de heroísmo con atajadas inverosímiles y frustrando tantos contrarios en el momento preciso.
Asume su responsabilidad, también el arquero nacional resalta que todo ha sido labor de equipo la que tiene a México a un paso de ser monarca.
"Es mi responsabilidad [salvar al equipo]. Nada podría ser posible sin la labor de los defensas que impiden los tiros y a mí me toca hacerlo mío. Tenemos ahorita la motivación que nos ha dado Julio a tope y estamos para ser campeones, porque ese momento lo hemos imaginado desde siempre", confiesa el cancerbero.
De ellos o de cualquier otro de los seleccionados nacionales se necesita su heroísmo, que se vistan de Julio Gómez como ayer para darle a nuestro país el orgullo de verlos ser los mejores del planeta. La gloria los estará esperando.
Espera Fierro ser el hombre gol del Tri
Con cuatro goles hasta ahora como el atacante más letal del “Tricolor”, el tapatío Carlos Fierro espera volver a anotar mañana en la final de la Copa del Mundo Sub-17 ante Uruguay, partido donde, afirmó, cambiaría su cosecha actual por uno que los guíe al título.
“Claro, cambiaría todo por meter gol y quedar campeón del mundo. Todos aquí somos compañeros, trabajamos para lo mismo, que es aportar para el equipo y antes de que pese es felicidad aportar para el equipo (con un gol)”, expuso el artillero de la Selección Mexicana.
“Estamos muy ansiosos porque empiece el partido y por ganarlo. Quisiera meter un gol para dedicárselo a mi familia y también a todo el país, para dedicarle este campeonato. Conforme fuimos avanzando mucha más gente se fue fijando en el equipo, no hay que defraudarlos y tratar de ganar el partido”. Admitió que siente “un poquito de nervios, como antes de cada partido, pero es normal, cualquier jugador los siente y con todo el apoyo de nuestra gente se nos van a ir quitando poco a poco”. Fierro comentó que ya se imaginó cómo terminará el choque ante los sudamericanos, de quienes reconoció la garra y entradas duras.
