Paz. El poeta Javier Sicilia habla con simpatizantes a su causa después que la Caravana por la paz llegara al Zócalo de Ciudad de México.
Javier Sicilia advirtió a la clase política y a los criminales que la sociedad civil organizada es más numerosa y tiene la fuerza moral y la dignidad que les da ser víctimas de la violencia, esto al concluir junto a unas 600 personas, entre víctimas, defensores de derechos humanos, activistas y jóvenes universitarios, la Caravana de Paz al sur en la ciudad de México, de donde salió el pasado 9 de septiembre.
"Decirles a los señores de la muerte y los gobiernos corruptos que somos mucho más que ellos y que en nuestra dignidad, nacida del dolor de nuestros muertos, de nuestros desaparecidos, de los ancestrales agravios a los más primeros de nosotros, llevamos vivo el país que quieren destruir y la paz que nos han arrancado", afirmó.
Las banderas de Catedral y de la Plaza del Zócalo ondeaban a media asta, no era por los miles de muertos y desaparecidos por la violencia que motivaron a Javier Sicilia y defensores de derechos humanos a recorrer el país, era por los caídos en el terremoto de 1985 que motivó a la sociedad civil a organizarse y rebasar la respuesta del Gobierno paralizado por la tragedia.
"Todo gobierno que olvida servir es un gobierno perdido", mencionó en el zócalo capitalino.
Durante 11 días la caravana cruzó nueve estados del sur del país: Morelos, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Veracruz, Puebla y DF, luego de que el Movimiento por la Paz realizara hace tres meses una por el norte del país.
"Hemos visto que la herida abierta en Ciudad Juárez, se ha ido extendiendo como una gangrena hacia el sur del país para juntarse con los dolores ancestrales que viven los pueblos indios y las comunidades del sur. Ambos agravios, que llevan a cuesta sus dolores y sus muertos, son producto del modelo económico".
'NO ES CULPA DEL PRESIDENTE' "Si el problema fuera el presidente Calderón, seguro que pediríamos que lo quitaran", afirmó el poeta en Puebla, antes de llegar a la Ciudad de México. Dijo que el problema es más profundo y tiene que ver con una clase política que ya no sirve a la ciudadanía y está distanciada de la gente.
