Posición. Aunque son figuras públicas, los involucrados llevan un asunto privado, por lo que solo conocen el expediente del caso. EL SIGLO DE DURANGO
Durango
La libertad de expresión no permite la ofensa, señaló Apolonio Betancourt Ruiz, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, al ser cuestionado sobre las declaraciones de José Rosas Aispuro Torres, al referir que Ismael Hernández Deras tiene a la autoridad de su lado, en el caso de la demanda civil interpuesta en su contra por este último.
Las ofensas y los señalamientos sin pruebas no son parte de la libertad de expresión, pues el término está relacionado con la facultad de poder decir la verdad en cualquier circunstancia.
Aispuro Torres señaló el pasado miércoles que los trabajadores del Poder Judicial erán empleados del Gobierno del Estado, tras presentarse a realizar los requerimientos respectivos frente a la demanda que interpuso en su contra el exgobernador de Durango.
Hacer afirmaciones ofensivas es una falta que puede estar en el ámbito civil o en el penal.
Aseguró que la jueza que lleva el caso actúa con total autonomía, la cual le otorga la propia legislación.
Agregó que un juez no es un empleado, sino un depositario de una autoridad judicial, tiene otra categoría.