EFE
Crias de alpacas. Como si de humanos se trataran, una treintena de llamas, una variedad de camélidos sudamericanos, han "ofrecido" sus vientres en alquiler para mejorar genéticamente la raza de las alpacas, sus "primas hermanas".
Con el objeto de reducir la alta tasa de mortalidad y devolver la pureza racial a las alpacas, varios embriones de estos camélidos fueron trasladados a vientres de llamas, animales más grandes y más robustos, en un proyecto pionero del Instituto Nacional de Innovación Agraria.