A usted, seguramente como a mí, le habrá pasado que, al escribir una palabra, le cambia una letra, una sola letra y el texto cambia totalmente de sentido y puede ser que ese error, en principio tan simple, lo meta a usted en serios problemas o que por lo menos se vea obligado a pasar una situación muy embarazosa...
Todo por una letrina... ¡perdón! ¡¿Ya vé?! Precisamente estoy diciendo las consecuencias que puede traer cambiar una letra en una palabra y en ese mismo momento digo letrina por letrita y definitivamente son dos cosas muy diferentes.
La letrina es el baño, donde se satisfacen necesidades fisiológicas que todos hacemos pero que no nos gusta que nos vean hacerlas. La palabra letrina es una forma contraída de lavatrina que literalmente es el lugar donde uno se lava. ¿Y por qué se contrae la palabra? Pues no sé. Tal vez porque cuando uno va al baño también se contrae... Bueno, pero sigamos con el comentario.
Hojear con H es pasar las hojas por ejemplo de un libro. Y uno dice: "Le voy a quitar la hache a ver qué pasa" y la hache no dice nada porque es muda.
Pero si le quitamos la "h" al verbo hojear, ya no se refiere a las hojas sino a los ojos. Ojear es echarle un ojo a algo. Por ejemplo, a la vecina guapa que anda regando el jardín con ropa muy veraniega.
Espirar con "s" tiene un significado totalmente diferente a expirar con "x". Espirar es lo contrario a aspirar. Aspirar es introducir aire por ejemplo a los pulmones y espirar es la acción contraria, o sea arrojar el aire, echarlo fuera.
Expirar en cambio es colgar los tenis, entregar el equipo o dicho más a la mexicana, petatearse. ¿Por qué petatearse? Porque antes, a los muertitos, cuando no había para comprar un ataúd, los enrollaban en un petate como si fuera una especie de taco mortuorio y así se les daba cristiana sepultura.
Veamos otro caso: grabar con b grande es labrar una superficie. Puede ser de metal o de madera, por ejemplo y gravar con v chica es imponer un tributo, o sea un impuesto, que se llama así precisamente porque se impone, libre y voluntariamente a fuerza. Al impuesto que se grava, por esa misma razón se le llama también gravamen.
Un caso más: cegar con "c" y segar con "s": la primera es quedar sin vista o quitarle la vista a otro, mientras que segar significa cortar la mies, cosechar los cereales.
Y a propósito de cegar me acordé de aquel viejo y sabio refrán que dice: Está bien que el amor es ciego, pero los vecinos se dan cuenta...
Escríbale a Don Juan Recaredo:
La dirección de su correo electrónico es donjuanrecaredo@gmail.com
¡REGALE LIBROS SOBRE EL APASIONANTE TEMA DEL IDIOMA! Todos con un poco de humor. Pida información a libros@comodijo.net o bien al teléfono (0181) 8148 8141 de Monterrey, N. L.
PREGUNTA DEL PÚBLICO.- Alejandro Hernández es un pimentoso jarocho que dice que le gusta jugar "pelota caliente", o sea que practica el llamado "rey de los deportes", el beisbol, y me reclama porque cuando hay dos juegos en un mismo día, se anuncia "Doble juego". Doble serían dos juegos exactamente iguales, ¿no te parece, amigo?
RESPUESTA. Si lo tomamos en el estricto sentido de la palabra, doble se refiere efectivamente a dos cosas exactamente iguales. Insisto, si lo tomamos con un poco de rigor, deberían anunciarse "dos juegos"
Me retiro con una frase casi filosófica: El amor es un sentimiento que nos inspira los más grandes proyectos... y luego nos impide realizarlos. ¿Cómo dijo? ¡LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA!