Energéticos caros. El alza en los energéticos reposicionó al peso mexicano en las últimas jornadas. ARCHIVO
Los mercados continúan apostando a favor de un súper peso en el corto plazo, asegura un reporte de la consultora Harbor Intelligence.
Los especialistas de la firma señalan que los ingredientes para que la apreciación de la moneda mexicana continúe están en la mesa, tales como la creciente entrada de dólares. Y la baja aversión al riesgo global.
Otros elementos son las mejores perspectivas de crecimiento para Estados Unidos y México, así como buenos fundamentales: relativamente bajo nivel de déficit y deuda pública y un bajo nivel de riesgo país. Ante esto, la empresa de consultoría espera que el peso mexicano se mantenga cotizando por debajo de su barrera de 12.30 pesos por dólar durante todo el mes de febrero.
Para la semana que inicia, prevé un tipo de cambio en un rango principal de 11.93-12.17 pesos por dólar.
Por otro lado, la semana pasada, la moneda mexicana se apreció 1.6 por ciento, donde la paridad se movió de 12.18 a 11.99 pesos por dólar.
El tipo de cambio cerró la semana por debajo de 12.00 pesos por dólar, algo que no ocurría desde la sesión del 6 de octubre del 2008.
Si bien el peso mexicano cedió un poco de terreno la semana antepasada, como resultado de un menor crecimiento económico al esperado de EU durante el cuarto trimestre del año pasado y las tensiones políticas en Egipto; durante la semana pasada, la moneda mexicana regresó a cotizar en un rango de 11.97-12.06 pesos por dólar, impulsado principalmente por datos alentadores de empleo y el sector manufacturero estadounidense.
La pérdida de 1.3 por ciento que presentó el peso mexicano el viernes 28 de enero sólo fue algo coyuntural, dice.
La noticia de un crecimiento económico en EU ligeramente menor al estimado por los analistas, de 3.2 por ciento contra 3.5 por ciento pronosticado, aunado con las crecientes tensiones políticas en Egipto, inquietaron a los mercados internacionales.
Economía en fase expansiva
En noviembre de 2010, los indicadores Coincidente y Adelantado se ubicaron en la fase expansiva del ciclo económico, lo que significa que están en crecimiento y por arriba de su tendencia de largo plazo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que en noviembre el Indicador Coincidente, que refleja el estado general de la economía, se localizó en la fase expansiva al registrar un valor de 100.3 puntos, con un incremento de 0.05 puntos respecto a octubre pasado.
Explicó que esto es resultado de la evolución de los componentes cíclicos del Número de Asegurados Permanentes en el IMSS, de las Importaciones Totales y del Indicador de la Actividad Económica Mensual, los cuales se posicionaron en la fase expansiva.
