Vaqueros abre serie esta noche en el Revolución a partir de las 19:30 horas contra Pericos de Puebla. En la imagen aparece Livingstone, abridor de ayer. (Fotos de Ramón Sotomayor)
- El relevo de Vaqueros Laguna echó por la borda una sólida actuación del estadounidense Bobby Livingstone y permitieron un rally de 7 carreras en la novena entrada, para caer ante Guerreros de Oaxaca por pizarra de 8 a 2, anoche en el último juego de la serie en el Estadio de la Revolución.
Los lanzadores abridores Bobby Livingston, por Laguna, y Sergio Valenzuela, por Oaxaca, colgaron argollas en las dos primeras entradas, sin permitir daño de sus enemigos a la ofensiva. Pero en la tercera tanda no hubo ayuda que librara a Valenzuela del ataque local, cuando los naranjas lo tocaron con par de anotaciones.
Livingston se asentó en gran forma en la lomita y siguió con un concierto de serpentina que desconcertó a la artillería oaxaqueña; transitaría 7 entradas sin permitir que ningún guerrero le pisara la tercera almohadilla. Pero su oponente en el montículo tampoco hizo mal las cosas, no permitiendo más daño en el score.
La reacción visitante llegó en la octava tanda, ya sobre el relevo de David Domínguez. Fue el sinaloense Yancarlo Angulo el primero en pisar la registradora por parte de Oaxaca, luego de disparar su primer cuadrangular de la temporada. Domínguez fue relevado por el zurdo Demetrio Gutiérrez, quien sólo entró a recibir un imparable y dejó su lugar a Julio Mañón, quien sacó los dos outs restantes de la entrada para preservar la ventaja de una carrera.
Mañon encontró su viacrucis en la novena tanda, cuando dejó ir la oportunidad de salvamento y dejó en desventaja a los locales. Aunque ponchó a Kevin Barker, aceptó imparables ligados de Érick Rodríguez y Sergio Gastélum, siguiendo Brena con imparable productor de la del empate. Cuando parecía que llegaban los extrainnings, vino la debacle del pitcheo naranja, que fiel a su costumbre no pudo redondear un buen juego.