Al tiempo que dijo desconocer si los elementos de la Dirección de Investigación del Delito (DID) consignados por la Procuraduría General de la República en los últimos días, ya habían sido sometidos a los exámenes de Control y Confianza, el Secretario General de Gobierno, Héctor Vela Valenzuela, reconoció que aún es insuficiente la infraestructura con que Durango cuenta para ese tipo de evaluaciones.
El funcionario estatal explicó que en la actualidad se tienen en Durango 12 puestos para realizar este procedimiento; sin embargo, son insuficientes, pues se requiere un día completo para evaluar a un solo policía en cada uno de esos espacios.
Dijo que afortunadamente se asumió el compromiso con el Consejo de Seguridad Pública Nacional de establecer un centro de operaciones para realizar este tipo de análisis de manera más ágil.
Por su parte, el vocero para temas de Seguridad Pública en la entidad, Juan Rafael Rosales Sida, dijo que los cargos y funciones de los servidores no les exime de ninguna imputación, pero hay que señalar que "nadie es culpable mientras no se demuestre lo contrario".
Respecto de una presunta desbandada de la DID, destacó que es una situación no corroborada por la SSPE, "siento que es un rumor que tendría que ser corroborado con plena exactitud".
A pesar de que Alejandro Moreno Valadez, vicefiscal del Estado de Durango, reconoció que hasta ayer 11 agentes no se han presentado a laborar (cinco pidieron su renuncia y tres solicitaron permiso), Rafael Rosales consideró que el término "desbandada" no aplica en este caso.
COMANDANTE DETENIDO, CON ANTECEDENTES El 28 de julio de 2008, El Siglo de Torreón informó de la detención de Pablo Leyva Barraza, recién consignado en un penal de máxima seguridad de Veracruz, por utilizar un vehículo particular con sirenas.
Se identificó como comandante de la hoy desaparecida Dirección Estatal de Investigaciones, cuando ya había renunciado a la misma, luego de que varios de sus compañeros fueran acribillados -en marzo de 2008- en el Municipio de Guanaceví.
