Elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) levantaron el paro de labores y liberaron ayer lunes por la noche las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que mantenían retenidas en reclamo de aumento salarial y mejora en sus condiciones laborales.
Un grupo de aproximadamente 90 elementos iniciaron el paro alrededor de las 08:00 horas de ayer lunes y se retiraron hasta las 21:30 horas bajo la condición de que se les resuelvan sus peticiones en menos de 48 y puedan sostener un diálogo directo con el gobernador Miguel Alonso Reyes.
Este acuerdo se logró después de un primer acercamiento entre los policías inconformes con el secretario General de Gobierno, Esaú Hernández, quien aclaró que al reanudar las labores, la autoridad policial no ejercerá ninguna medida de represión contra los manifestantes.
Los inconformes también solicitaron la destitución del general Jesús Pinto, secretario de Seguridad Pública; la disminución de la carga de trabajo a una jornada de 12 por 24 horas, pues denunciaron que hay días en que se labora hasta 30 horas diarias.
De igual manera, piden un aumento salarial, incremento al seguro de vida que actualmente es de 150 mil pesos, mayor equipamiento, vehículos y armamento.
Algunos revelaron que trabajan "con incertidumbre" dentro de la corporación por los diversos ataques a los policías estatales perpetrados por grupos armados, ya que a la fecha sigue desaparecido un comandante.
Resaltaron la importancia de recibir "un trato digno" por parte de las autoridades y respeto a sus derechos, sobre todo en el otorgamiento de los elementos necesarios para "dar un combate real" a la delincuencia.
Al salir de la reunión, el vocero del gobierno estatal, Mario Caballero Ramírez, informó que el punto respecto a la destitución del general Pinto "no estuvo sujeto a la negociación", al precisar que primeramente los policías tendrán un acercamiento con el mandatario.
Mientras que en los aspectos laboral y presupuestal se analizarán a la brevedad para mejorar el aumento directo al salario, dotar de mejor armamento al personal operativo, incremento del seguro de vida, todo con base a la disponibilidad presupuestal del gobierno.
Incluso, en disminuir la carga de trabajo con el objetivo de que los policías tengan un mayor rendimiento en sus actividades diarias de vigilancia.
