El joven llevaba tres semanas recluido luego que sus padres, miembros de una comunidad menonita, decidieron darle un escarmiento.
Un joven canadiense fue encerrado en una caja de apenas un metro cuadrado, esto después de ser acusado por robarse tres gallinas y material combustible.
Johan Knelsen llevaba tres semanas recluido, luego que sus padres, en connivencia con los líderes de la comunidad menonita, decidieron darle un buen “escarmiento”.
Las autoridades acudieron al lugar para corroborar los hechos tras una denuncia de algunos miembros de la comunidad religiosa.
Los padres explicaron que decidieron encerrarlo alegando que también sufre “problemas mentales y con el alcohol” y “pretendía usar un celular, estaba usando la radio y en esa comunidad está prohibido usar la tecnología".
Para colomo, el insensato, no profesa la religión de su comunidad.
El joven quien no había salido de la caja ni siquiera para ir al baño, fue liberado inmediatamente por las autoridades.
Los padres, ahora, son acusados de tentativa de homicidio, lesiones, privación de la libertad, coacción y torturas.
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