"Sin profesores competentes no es posible formar competencias en los alumnos"
Rolando Cruz García
A Secretaria de Educación Pública, busca implementar una profunda transformación en el sistema educativo nacional, correspondiente al nivel medio - superior en México y pretende iniciar en agosto del presente año, con el arranque del ciclo escolar 2011 - 2012; fundamentada en diversas acciones que van enfocadas, sobre todo a la formación de los docentes, lo que nos indica que por fin la SEP reconoce que el eslabón más débil de la cadena educativa, en los bachilleratos del país, es el profesor.
El programa de formación docente para los bachilleratos del país tiene como eje rector un esquema basado en 11 competencias genéricas que deberá tener el egresado de este nivel en todo el país (competencias que debe poseer el profesorado) y que obedecen a las recomendaciones hechas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), quienes insisten en que el mayor reto educativo para el bachillerato en México es el de elevar el grado de eficiencia en el desempeño de sus alumnos.
La transformación puede lograrse, según la OCDE, priorizando las competencias cognitivas e interactivas sobre las tareas rutinarias, que aún permean el trabajo en las preparatorias, "se trata de darle paso a competencias en las que el estudiante use el cerebro, el pensamiento analítico y la creatividad", señala el organismo.
La organización internacional añade que un elemento que puede contribuir en la mejora educativa, es el de dar mayor autonomía a los actores (profesores) de cada centro educativo. En la realidad sabemos que los planes y programas de estudio, por ejemplo, son dictados desde el centro del país para todas y cada una de las regiones de México, sin una necesaria contextualización a cada diferente realidad en específico.
La Subsecretaría de Educación Media Superior de la SEP, coincide con los anteriores señalamientos y puntualiza que, si no se transforma el sistema educativo mexicano para incluir estas competencias en los alumnos, el país seguirá rezagándose en un mundo cada vez más globalizado y más competitivo.
Es por lo anterior que se conforma un nuevo perfil del egresado del bachillerato para un nuevo sistema nacional, que es lo que se propone la actual administración federal, sin embargo se comprueba en los hechos, que la educación media - superior en México, sigue siendo uno de los niveles educativos más descuidados del sistema, ya que cuenta con menos apoyo presupuestal, con menos equipamiento e infraestructura y con los planes de estudio más obsoletos de los últimos años.
El bachillerato requiere en la actualidad de una profunda revisión de las distintas currículas que se ofertan en el país y que se encuentran desvinculadas; sobre todo entre ellas y con el sector social y productivo, carecen de actualización en contenidos y metodología, además de no promover la formación integral de los alumnos.
Las 11 competencias, han sido consensuadas entre la SEP, las autoridades educativas estatales y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y se agrupan en seis categorías bien definidas: autodeterminación, expresión y comunicación, pensamiento crítico y reflexivo, aprendizaje autónomo, trabajo colaborativo y participación responsable en la comunidad. Todas ellas con profundas carencias en el esquema educativo actual.
Para poder implementar esta reforma, será necesario darle nuevas herramientas a los profesores, que son los que finalmente forman al egresado; insistimos en que los profesores no podemos solucionar nuevos problemas que se le presentan en su trabajo cotidiano, con viejos esquemas por demás rebasados.
El problema del profesorado de preparatoria, es que está integrado por profesionistas de diversas disciplinas que no estudiaron para enseñar, que repiten los esquemas con los que fueron formados (en el mejor de los casos repiten el estilo del mejor profesor que les enseñó), no tiene formación didáctico-pedagógica (y en muchos casos no les interesa tenerla), además de que no privilegian la superación y la profesionalización de su trabajo académico.
Esta acción abarca a más de 90 mil profesores de bachillerato en los sistemas públicos y privados y se planea que sean las instituciones de educación superior (IES), las que oferten este programa de formación de docentes, aunque serán otras instancias externas las que lo acrediten.
Lo importante es asegurar que no será otro proyecto más, que les otorgue a los profesores de bachillerato, más papeles o credenciales con los que busquen acreditar un mejor desempeño académico. No será, a decir de las autoridades de la SEP, un programa más y se asegura que por primera vez los profesores tendrán la garantía del financiamiento en su capacitación y actualización.
Enhorabuena por el país, ya que la educación media - superior está abandonada, obsoleta, no tiene identidad, no cuenta con mecanismos de evaluación, carece de criterios normativos actualizados, además de estar desvinculada del sistema básico, del superior y del sector social y productivo. Por todo lo anterior esperamos resultados tangibles y concretos.
Agradezco
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