Previniendo las secuelas de la quimioterapia, el ex mandatario decide afeitarse; su esposa Marisa le ayudó con la navaja. (EFE)
Anticipándose a las secuelas de la quimioterapia, el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se afeitó la cabeza y la barba.
Con ayuda de su esposa Marisa, Lula decidió rasurarse el cabello y el vello facial, dejándose únicamente la línea del bigote.
El ex dirigente brasileño está recibiendo tratamiento contra el cáncer de laringe que padece en el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, mismo que atendió a la actual presidenta Dilma Rousseff y al presidente de Paraguay, Fernando Lugo.
De acuerdo al diagnóstico de los médicos, Lula estaría totalmente curado en un periodo de cuatro meses.