Hace unos días se realizó un sondeo sobre los servicios públicos en la ciudad de Gómez Palacio, los servicios evaluados fueron recolección de basura, agua potable, drenaje, seguridad pública y pavimentación y alumbrado.
Sondeo
La cantidad de personas que atendieron la llamada para dicho sondeo fueron aproximadamente 239 según datos oficiales.
En todos los rubros, excepto seguridad pública fueron aprobados por la ciudadanía, obteniendo porcentajes de aprobación de un 70 hasta un 89 por ciento, lo cual implica un nivel de aprobación de los servicios públicos que ya quisiera Barack Obama en sus mejores tiempos.
Desde mi punto de vista habría que lanzar varias hipótesis que expliquen los resultados, la primera de ellas desde luego la interpretación oficial, aunque solo hablemos de un sondeo y de un porcentaje bastante bajo en relación a la población existente en Gómez Palacio.
Otra es que los ciudadanos, parecieran vivir en otra realidad, o vivir en Finlandia, Holanda ,o en una donde todos los servicios son maravillosos y no habría nada que mejorar, ya que todo está en perfectas condiciones.
Una más es que la población de la vecina ciudad, no le interesa, como desafortunadamente en muchas otras ciudades del País, la vida pública y sus servicios.
Un ejemplo de esto es la reciente convocatoria de algunos ciudadanos a salir a una especie de desfile con sus tradicionales "vochos", cuando se esperaba una gran cantidad de estos autos compactos, la respuesta fue escasa o casi nula, cuando la población gomezpalatinos posee una gran cantidad de estos autos.
Hablaríamos también de alternancia política, en dicha ciudad parece que aquella es una palabra extraña y no que no existe en el diccionario, de hecho ya se conoce al candidato del PAN a la alcaldía de Gómez Palacio como Augusto Cárdenas, no por la línea de izquierda que maneja si no por la cantidad de intentos.
Desde luego no estamos diciendo que los datos no sean valiosos y reales, sin embargo los comentarios en corto de los ciudadanos, por Internet, vertidos en varios medios de información parecerían decir lo contrario.
Una última hipótesis es que el que escribe esta columna, se le pasaron las copas en esta semana santa y no ha visto el crecimiento que ha tendido la ciudad en los últimos años.
Ojalá que en estos momentos de reflexión para algunos, de relajación para otros y de reuniones sociales para muchos otros, podamos hacer algo desde nuestra trinchera, ya que no solo toca a los gobernantes hacer algo por la ciudad, sino a los ciudadanos comprometerse con el tipo de ciudad que se pueda tener.
Un ejemplo de esto es las personas que hace algunos años se reunían en la colonia Filadelfia para celebrar misas a la sombra de un árbol, con un sacerdote y un puñado de gente entusiasta y comprometida.
10 años después existe una capilla bonita y funcional que alberga a una buena cantidad de visitantes y se hizo realidad a través de un sueño de varios pobladores comprometidos.
Sé que existen ejemplos negativos y positivos como en todo, pero poner un granito de arena por la ciudad no estaría mal, aunque el gobierno tendría que hacer su tarea, que a principio de cuentas es el responsable de los servicios públicos.
¡Hasta la próxima!
