Durante muchos años el restaurante El Golfito en la ciudad de Gómez Palacio ha sido una tradición, según nos dice el animador desde 1942. En lo personal recuerdo asistir hace muchos años a jugar en la parte de atrás mientras mi familia convivía con varias botellas alrededor de la mesa...
...por un buen tiempo.
Podía Usted llegar, incluso hoy, con su coche y estacionarlo frente al lugar y un mesero atingente le llevara sus cervezas o bebida preferida en menos de lo que canta un gallo, por lo que si usted lo desea podrá permanecer en su vehículo sin necesidad de bajar salvo que las necesidades fisiológicas así se lo exijan.
Tanto la carne como el servicio siguen siendo de primer nivel, como diría el sangrón comentarista de deportes, ya que la carne sigue teniendo la misma suavidad que antaño y la atención de los meseros y barman está a la orden del día. Lo que sí parece haber envejecido con el golfito son los meseros y los totopos al igual que la salsa que parecen venir de la edad de la inauguración del lugar.
En cuanto a la gente que asiste cotidianamente parece ser un atributo positivo más, debido a que es gente que se conoce y tiene como tradición pasar entre semana por unos tragos y el fin de semana a divertirse como una especie de psicoanálisis grupal semana a semana.
En caso de que usted desee llevar a su familia lo puede hacer, incluso me pareció que como hace años también puede llevar a su novia, amiga o asistente, sobre todo si el día fue tan arduo y no alcanzó a tomar el dictado en horas de oficina, por lo que le ayudará cenar tranquilamente y hablando de negocios con la calma del mundo, si su esposa le llama, usted con mucha tranquilidad podrá decirle estoy trabajando.
Si su intención es escuchar música, el lugar parece tenerlo también, el artista que tienen ahí además de animado le podrá cantar desde canciones de Roberto Carlos hasta de los Tigres del Norte e imitar la voz de Paulina Rubio, pasando por una que otra canción de Enrique Guzmán para cubrir todas las décadas.
Le recomiendo darse una vuelta por el lugar, y aprovechar que en estas fechas ya el calor amaina un poco y tomarse unas bebidas en forma tranquila y con un buen servicio, y no olvide pedir su carne.
¡Hasta la próxima!
