Se agudiza. La falta de agua suficiente para el riego del Bosque Venustiano Carranza está causando estragos en los árboles y las plantas que se debilitan y hacen vulnerables a las plagas de la temporada.
Sigue la sequía en el Bosque Venustiano Carranza. Casi dos meses y medio tiene el más importante paseo público de la ciudad sin regarse adecuadamente. El color pálido tanto de los árboles como las plantas y el césped, da cuenta de la gran falta de humedad que sufren.
La falta de agua se debe a que todo ese tiempo es el que lleva descompuesta la bomba de la noria ubicada a un lado de las oficinas de donde se supone sesiona el Patronato del Bosque prácticamente no existe.
El patronato no solamente no ha realizado ninguna actividad en apoyo del paseo público, sino que sigue permitiendo el deterioro de los espacios físicos como son andadores y bancas.
Así, el bosque sigue con problemas de vandalismo, con los viejos y deteriorados servicios sanitarios concesionados.
Además, particulares construyen una módulo de sanitarios para lo cual taparon un andador situado a un costado del área de frontenis.
El bosque es aseado en el exterior por brigadistas de limpieza, pero en el interior tiene problemas de suciedad porque los contenedores siempre están repletos de basura y no los vacían.
Los vendedores ambulantes también siguen representando un foco de contaminación porque no asean sus espacios y los que expenden alimentos tiran grasas y detergentes en las partes bajas de los árboles.
La bomba descompuesta apenas se instaló a finales del 2009 y el año pasado se le dio mantenimiento general.
Este año ya no se le atendió debidamente y se descompuso hace dos meses y medio.
Autoridades municipales habían anunciado que se repararía el equipo pero debido a la falta de dinero, ni se repara, tampoco se asegura si compran una nueva bomba que debe ser sumergible .
En el exterior del bosque y con la tolerancia de Plazas y Mercados ya se instalaron vendedores que dejan ahí sus remolques, como es el caso de los comerciantes de gordas y de pollos fritos ubicados en la avenida Bravo y en la calle Juan Pablos.
