La semana anterior hablamos de la generación de patentes en México, pero, ¿qué es una patente? Una patente es la manera mediante la cual una invención, puede explotarse económicamente de manera exclusiva en un territorio determinado, lo que nos lleva a preguntarnos, ¿qué es una invención? Una invención es toda creación humana que permite transformar la materia o la energía que existe en la naturaleza, para el aprovechamiento del hombre y para satisfacer sus necesidades concretas. Ahora bien, existen algunos requisitos para que las invenciones sean susceptibles de patentes, en principio, las invenciones deben ser nuevas y tener una aplicación industrial, es decir deben tener una utilidad, servir para algo. El término "industrial" es amplio, por lo que, por ejemplo, podemos tener una patente de un abrelatas que es de uso "casero" y no necesariamente "industrial". Previamente, cuando hablamos de las marcas, observamos que el registro de una marca es nacional, es decir que otorga el derecho exclusivo a usar una marca dentro de un determinado país, es decir, para otorgar una marca se realiza una búsqueda interna en el país para determinar si existe alguna marca igual o similar que pueda considerarse como impedimento, veíamos por ejemplo, como Burger King, no pudo registrar su marca en Australia, en virtud de un restaurante que ya tenía dicha marca en ese país, en donde por cierto, dicha cadena restaurantera utiliza la marca "Hungry Jacks".
A diferencia de las marcas, una invención, para que obtenga su patente debe ser nueva no sólo en el país donde se pretende proteger, sino en todo el mundo, para ello, si por ejemplo un inventor mexicano realiza el trámite de registro de su patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), entonces, dicho Instituto, con el apoyo de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, y en base a diversos Tratados Internacionales en materia de Patentes, realiza una consulta en las bases de datos de las diversas oficinas de patentes del mundo, para poder así, determinar si la invención que se analiza es nueva o no. Por ello, el trámite de registro de una patente oscila entre 2 a 4 años promedio, aunque con los avances tecnológicos que existen en la actualidad, dicho tiempo se debe reducir pronto en beneficio de los usuarios. Una vez que se determinan tanto la novedad como la utilidad de la invención, se otorga el registro en el país en donde el solicitante haya tramitado su patente, con la ventaja que gracias a diversos Tratados Internacionales, puede solicitar ante el mismo IMPI, el registro de su patente en otros países, en el entendido que sólo podrá explotar de manera exclusiva su invención en aquellos países en donde haya registrado su patente, es decir si por ejemplo, un mexicano registra su patente en México, pero no así en los Estados Unidos, nadie más podrá registrarla en dicho país (la oficina de patentes de los EUA la negaría en virtud de la patente mexicana), sin embargo, cualquier persona podrá utilizar la invención en los EUA sin pagar regalía alguna al inventor mexicano. En México, las patentes tienen una vigencia de 20 años, los cuales no son prorrogables, por lo que al término de dicha vigencia, cualquier persona puede hacer uso de la invención sin pagar regalía alguna al inventor. Es precisamente por ello que la formula de la "Coca Cola" no se ha protegido como patente, sino como un secreto industrial, de lo contrario, hoy cualquier persona podría hacer el jarabe con el cual se produce el refresco más famoso del mundo. Como siempre, la recomendación es acercarte con un experto que te asesore para formular la estrategia que te permita proteger y explotar tu invención de la mejor manera posible... ¡hasta la próxima!
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