Mark Sánchez consideró que "sin duda" ha mejorado en su tercera temporada como quarterback de los Jets de Nueva York, pese a que algunos aficionados y medios se preguntan si alguna vez podrá llevar al equipo al Super Bowl.
El mariscal de campo de ascendencia mexicana dijo el miércoles que entiende que hay muchas expectativas sobre él, pero añadió que confía "absolutamente" en que cuenta con el apoyo de sus compañeros.
Sánchez viene de una pésima actuación frente a los Giants el sábado pasado, cuando los Jets sufrieron una derrota que puso en serio riesgo sus aspiraciones de avanzar a los playoffs.
De acuerdo con Sánchez, no hay motivo para lamentar el hecho de que juega en Nueva York y suele ser sujeto de mucha atención de la prensa.
"Gane, pierda o empate, les juro que soy el tipo más afortunado del mundo", aseguró.
Los Jets (8-7) necesitan una victoria en Miami, el domingo, así como la combinación de otros resultados para meterse a la postemporada.
