Datos. El expresidente de Costa Rica, Óscar Arias durante la segunda jornada de actividades de la Novena Cumbre de Negocios 2011, Prioridades para una Nueva Era.
Los expresidentes Óscar Arias Sánchez, de Costa Rica, y Álvaro Uribe, de Colombia, expusieron que el golpe del narcotráfico en Centroamérica propició en la última década un saldo de 125 mil muertos debido a la debilidad de las instituciones, así como la falta de presupuesto para hacer frente a este problema.
Arias dijo que las muertes relacionados con el crimen organizado en Centroamérica son mayores a las muertes que se registraron durante los períodos más cruentos de enfrentamientos civiles en los diferentes países que integran la región.
"Basta con decir que 125 mil centroamericanos han muerto en la última década como consecuencia del crimen organizado y el narcotráfico, un número mayor en comparación con las guerras civiles en su etapa más cruenta", expuso Arias durante su participación en la novena edición de México Cumbre de Negocios.
Uribe, por su parte, aseguró que el impacto del crimen organizado en Honduras, El Salvador y Guatemala, ha dejado atrás la injerencia del Estado y, consideró, que es necesario el apoyo internacional para enfrentar a la delincuencia.
"Es preocupante la situación de Honduras, la situación de El Salvador y de Guatemala. Ahí se necesita la concurrencia de la comunidad internacional, porque por más voluntad política que se tenga, ese desafío a la seguridad que es el narcotráfico es mucho mayor", dijo Uribe.
El expresidente consideró que la insuficiencia presupuestal, insuficiencia logística y también debilidad de instituciones han permitido que la intervención del crimen tenga un alto impacto en el tejido de aquellas sociedades.