Por los cuatro puntos cardinales de la capital michoacana, el crimen organizado esparció 21 cadáveres durante tres horas y obligó a las autoridades a trabajar a marchas forzadas. De acuerdo con las primeras indagatorias, en un hecho sin precedentes, se indicó que los homicidios fueron perpetrados por un mismo grupo.
La mayoría de los 21 asesinados son jóvenes menores de 25 años, revelaron fuentes de la Procuraduría General de Justicia del estado. A las víctimas les dejaron un mensaje, cuyo contenido no fue revelado por las autoridades.
Los primeros reportes se recibieron alrededor de las 20:30 horas, en la Central de Emergencias de la Secretaría de Seguridad Pública. El hallazgo inicial fue en la salida a Mil Cumbres —al oriente—; a unos metros de la antigua carretera a México la policía localizó cinco cadáveres.
Ninguno de los primeros ajusticiados presentaba lesiones, por lo que criminalistas presumen que los asfixiaron.
En tanto, en la comunidad de Atapaneo, al norte de Morelia, encontraron otros tres cadáveres; estaban en una cancha de futbol, frente al panteón civil.
Peritos criminalistas levantaron otros cinco cuerpos cerca de la carretera federal Morelia-Salamanca, también al norte; en una brecha cercana a la autopista Morelia-Pátzcuaro, al sur del municipio, tiraron cinco cadáveres,donde dejaron un narcomensaje.
Los otros tres hombres muertos estaban muy cerca de la comunidad de Cointzio, al poniente de la ciudad, con lo cual suman 21 víctimas; sin embargo, al cierre de esta edición continuaba la búsqueda en caminos y brechas.
Policías federales y estatales, así como soldados de la 21 Zona Militar, realizaban recorridos por salidas y a accesos a Morelia; los PF patrullaban la zona norte y el Ejército la parte sur.
La PGJE confirmó la cifra de 21 muertos y buscan un cadáver más, en atención a un reporte recibido en las áreas de atención a emergencias.