Cinco hombres, todos ellos pertenecientes a una familia de comerciantes, fueron asesinados en pleno camellón de la avenida Ferrocarril, con armas de alto poder tipo R-15 y AK-47.
La madrugada del 18 de septiembre, alrededor de las dos de la mañana, vecinos de la colonia Santa Cruz Tlapacoya despertaron sobresaltados al escuchar ráfagas de armas de fuego.
Cinco jóvenes de entre 20 y 25 años, literalmente fueron fusilados.
El procurador del Estado de México, Alfredo Castillo Cervantes, confirmó que los 5 hombres asesinados eran familiares entre sí, hermanos, primos y cuñados, quienes vendían teléfonos celulares.
Las víctimas fueron levantadas por un comando armado la tarde del domingo en el centro de Chalco, donde a decir de fuentes locales, fueron entre seis y ocho los hombres secuestrados, de los cuales sólo aparecieron cinco en Tlapacoya.
