Caso Florence Cassez. El mandatario mexicano reconoce la complejidad del problema, pero aseguró que el país es respetuoso de las leyes.
El presidente Felipe Calderón advirtió ayer que México no se dejará someter por el Gobierno francés y menos aún por cuestiones arbitrarias.
Calderón habló por primera vez, en entrevista concedida a TV Azteca, del caso Florence Cassez, que ha lastimado la relación bilateral entre México y Francia.
"Lo que sí no vamos a permitir, es que por situaciones totalmente arbitrarias se quiera someter a México, nosotros hemos sido respetuosos siempre de su Gobierno, de sus Poderes, de sus instituciones y exigimos el mismo respeto", sostuvo.
El mandatario consideró que un caso judicial no debe perturbar las relaciones entre dos países.
"No puede haber un caso judicial que ha sido totalmente revisado y que enturbie las relaciones entre dos países: sería un error, me parece un error que no lo podemos permitir.
"Yo respeto la política interior de otros países, pero no se puede pensar que México, porque es un país en desarrollo, porque es un país con carencias, es un país que se va a dejar, pues por supuesto que no y se equivocan quienes así piensen", abundó.
Para Calderón, los pueblos de Francia y México son amigos, y dijo que del Gobierno mexicano habrá siempre la mejor disposición para tender la mano y profundizar las relaciones.
Luego que se confirmara la sentencia de 60 años a Cassez, el presidente Nicolás Sarkozy recibió a los padres de la acusada y pidió a México su traslado a Francia, petición que ha sido rechazada.
Ayer, la Cancillería mexicana aseguró que la ciudadana la francesa no es objeto de traslado para cumplir su sentencia en Francia.
La dependencia explicó que existen diferencias sustantivas entre los sistemas jurídicos de ambos países, y que México no tiene la garantía de que, de ser trasladada, cumpla su sentencia.
Argumentó que en este caso no procede el Convenio de Estrasburgo sobre Traslado de Personas Condenadas, ya que establece claramente que se requiere el consentimiento del Estado de sentencia y del Estado de ejecución para que se apliquen sus disposiciones.
"Las declaraciones interpretativas formuladas por Francia al Convenio de Estrasburgo constituyen un impedimento para garantizar que Florence Cassez purgue la totalidad de su pena en territorio francés.
"Dichas declaraciones prevén, que en caso de que Florence Cassez fuera trasladada a su país de origen, su condena quedaría sujeta a las autoridades judiciales francesas en cuanto a las modalidades de su ejecución, incluida la suspensión y reducción de la misma", puntualizó en un comunicado.