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MÉXICO SUEÑA CON EL ESPACIO

En medio de la polémica se crea la Agencia Espacial Mexicana

José Hernández

José Hernández

CUAUHTÉMOC TORRES

Y el sueño se cumplió. El 30 agosto de 2009, el astronauta mexico-americano, José Hernández, se encontraba en el espacio abordo del Discovery hacia la Estación Espacial Internacional (EEI). Lo primero que comenzó a hacer fue relatar sus experiencias a miles de seguidores en la Tierra a través de la red social Twitter. José estuvo varios días en la misión espacial que resultó todo un éxito.

A su regreso, el país entero se sentía orgulloso de tener un representante mexicano en tan destacada misión. De ahí en adelante empezaron más planes, más proyectos, pero no sólo para él, sino para la ciencia mexicana.

Otro sueño estaba por cumplirse. El 19 de abril de 2010, la Cámara de Diputados aprobó por 280 votos a favor, dos en contra y cuatro abstenciones, la creación de la Agencia Espacial Mexicana (AEXA), un organismo público descentralizado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y cuya función principal será formular las líneas generales de la Política Espacial de México y el Programa Nacional de Actividades Espaciales. El presupuesto para comenzar a funcionar asignado a la agencia fue de 10 millones de pesos.

Ante tal magnitud, el presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología, Reyes Tamez Guerra, que llevó el análisis de la iniciativa original -del diputado Moisés Jiménez Sánchez-, destacó el impacto que tendrá la AEXA en la generación de conocimiento, así como en la formación de técnicos e investigadores.

Así, se dio a conocer que en la Ley de la Agencia Espacial Mexicana se señala que el organismo promoverá el desarrollo de los sistemas espaciales y los medios, y la tecnología e infraestructura para la consolidación y autonomía de este sector en México. Además el organismo será el encargado de establecer áreas prioritarias de atención en la investigación espacial en México.

Una de las razones por las cuales se decidió crear la agencia, es porque esta área del conocimiento y la investigación está descuidada en México. Mientras que en Estados Unidos se invierten 900 dólares por habitante en ciencia y tecnología, en el país sólo se programan 14 dólares por persona.

Pero la creación de la agencia espacial también ha tocado puntos polémicos. A sólo días de aprobarse la AEXA, los priistas en la Cámara de Diputados consideraron que eran “irrelevantes” los diez millones de pesos que ejercería en 2010. Alberto Cano Vélez destacó que el presupuesto destinado era “insuficiente”. En tanto, su correligionaria Sofía Ríos Castro advirtió que el organismo podría convertirse en un “elefante blanco”.

Pero con todo y que la propuesta fue aprobada por la Cámara de Diputados y publicada en el Diario Oficial de la Federación, la polémica en torno a l agencia no quedó ahí. Inmediatamente, al saber la noticia, los cibernautas mexicanos se lanzaron a una de las redes más importantes en el mundo, Twitter, para opinar sobre el tema. La mayoría de las opiniones era en torno de burla.

“No sé porque cada vez que hablan de la Agencia Espacial Mexicana, pienso en viajes Ponchito”, dijo uno de los usuarios.

“Dora la explorer irá a la Agencia Espacial Mexicana” y “Hasta ahora mi semana ha sido más improductiva que la Agencia Espacial Mexicana”, manifestaron otros de los usuarios de la red social.

ASESORÍA DE LUJO

Luego de la polémica levantada por la AEXA, las autoridades confirmaron que el astronauta de origen mexicano José Hernández y el ingeniero Fernando de la Peña, llegarían a México para supervisar el lugar para el centro de lanzamiento de satélites.

Además, se reveló que la AEXA tendrá su base en Quintana Roo, su centro administrativo en Tulancingo, Hidalgo y en Chihuahua un complejo para investigaciones y entrenamiento de los nuevos astronautas mexicanos.

La sede que será construida en Chetumal, Quintana Roo, tendrá inversión de 120 millones de dólares y contará con una plataforma de lanzamiento, una pista, una unidad de entrenamiento subacuática y el museo del espacio.

Las autoridades locales consideran que la construcción de la base espacial atraerá a empresas de la industria aeroespacial, con los consiguientes beneficios para la economía y el empleo.

A finales de noviembre, el astronauta méxico-americano, José Hernández Moreno, fue recibido en el Senado de la República en donde se le rindió un reconocimiento por sus logros en materia aeroespacial al conseguir viajar al espacio en una misión que tuvo lugar entre los meses de agosto y septiembre de 2009.

Momentos antes de ser recibido en el pleno, Hernández Moreno se encontró con los integrantes de la Comisión de Ciencia y Tecnología que encabeza Javier Castellón Fonseca en donde informó de su disposición a asesorar la creación de una Agencia Espacial Mexicana.

Además, se informó que la agencia espacial estadounidense NASA comenzará el próximo mes a entrenar en una de sus instalaciones submarinas en Florida a personal mexicano.

“La intención es que a corto plazo se inicie la capacitación de científicos, académicos y personas altamente calificadas para que en un futuro sean los que se incorporen a misiones espaciales verdaderas”, precisó el impulsor de la AEXA, Fernando de la Peña.

El entrenamiento se desarrollará en el Laboratorio Aquarius y parte de lo que allí suceda podrá verse en aulas mexicanas de nivel básico a superior, para involucrar a las nuevas generaciones en el tema espacial.

El siguiente paso de la estrategia espacial de México será concretar en 2011 y en un plazo de cinco años otros convenios similares con Brasil y Rusia, así como con otros países que conforman actualmente la Comunidad Espacial Internacional.

“En la primera base se construiría una plataforma de lanzamiento, una pista, una unidad de entrenamiento subacuática y el museo del espacio”, dijo De la Peña.

Para una futura segunda base se requerirá menor inversión, pues se aprovecharían unas instalaciones existentes en el central estado de Hidalgo. Desde dicho lugar se coordinarían todas las operaciones, como el que los estadounidenses tienen en Houston.

Existe una propuesta para una tercera y última base en el norte del país; se utilizaría para la fabricación de artículos aeroespaciales y tecnología de vanguardia.

Las metas de AEXA son iniciar en un plazo de entre 10 a 20 años el desarrollo de herramientas de exploración y componentes para misiones a la Luna y a Marte, como transportes, sistemas de soporte de vida, sistemas alternativos de generación de energía y comunicaciones.

SOBRE LA AEXA

Pero con todo y que se especificó el objetivo de la Agencia Espacial Mexicana, es fecha en que muchos mexicanos desconocen a ciencia cierta qué se hará o desarrollará ahí. Para eso, el astronauta José Hernández explicó “no podemos pensar que va a diseñar su propia nave, sino que será un país que dé apoyo al desarrollo espacial, como lo hacen Canadá y la Comunidad Europea, que ayudan en ciertos aspectos”.

Además consideró que México debe firmar acuerdos con Estados Unidos y otros países de la comunidad espacial para colaborar en algún campo e identificar “tecnologías nicho” en las que pueda invertir y hacerse experto.

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