El ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo afirmó ayer que su nombramiento no es resultado de padrinazgos ni compromisos de ningún tipo, y que su voto en el máximo tribunal será sólo uno más.
Durante la sesión solemne en la que fue recibido por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el ministro sostuvo que su llegada al máximo tribunal es ajena a influencias de cualquier tipo y está basada únicamente en su trayectoria de la carrera judicial. "Hoy que cumplo mi anhelo personal de formar parte de este tribunal constitucional, lo hago exclusivamente con base en mi trayectoria dentro de la carrera judicial, sin compromisos, ni padrinazgos", dijo.
Pardo Rebolledo consideró que su nombramiento, el primero de un magistrado, es un reconocimiento a la carrera judicial y a las aportaciones del Poder Judicial a la consolidación de las instituciones y el Estado de Derecho.
Aseguró que su trabajo en el Poder Judicial de la Federación, que incluye dos décadas como juez, "sólo ha respondido y responderá a mi conocimiento del derecho y al sentido de justicia al que busco acercarme en cada asunto que ha estado en mis manos, siempre al margen de cualquier influencia ajena al derecho".
Por ello, ante las expectativas de que su llegada a la Corte romperá el empate en por lo menos 24 asuntos que han sido aplazados tanto en el Pleno como en la Primera Sala, a la que fue adscrito, aclaró que su voto será sólo uno más, con la misma fuerza de los de sus colegas.
"Mi voto en este pleno y en la sala constituirá sólo uno más que, con la misma fuerza que tienen los compañeros ministros, contribuirá a la decisión colegiada".