El Señor hizo el bosque.
Luego hizo la montaña.
Seguidamente hizo el mar con sus orillas.
A continuación hizo los desiertos.
Después hizo el cielo estrellado.
Le preguntó el Espíritu:
-¿Qué haces?
Y respondió el Señor:
-Estoy haciendo templos.
¡Hasta mañana!..