La joven madre dio a luz un hijo.
Todos le dieron los parabienes por haber traído al mundo un niño tan hermoso. La joven madre estaba llena de felicidad.
En la aldea vivía un hombre diestro en adivinar el porvenir.
La joven madre le preguntó:
-¿Qué será mi hijo cuando crezca?
El hombre cerró los ojos para ver mejor, y luego respondió:
-Será poeta.
La joven madre, entonces, se echó a llorar, y exclamó llena de dolor:
-¡Pobre hijo mío!
¡Hasta mañana!..