En una columna de este diario que ocupa la sección de Gómez Palacio, apareció una información señalando que el tesorero de la administración que encabeza Rocío Rebollo, Miguel Chibli Navarro, tiene en la nómina a su hermano y a su hijo.
El día de hoy se publica que el rumor es cierto: efectivamente laboran en la misma administración Gerardo Chibli Navarro, hermano y Miguel Chibli Campos, el hijo.
El caso de Gerardo tiene una salvedad, el señor entró a trabajar el 11 de septiembre de 2007, cuando el tesorero no tenía nada que ver con el Municipio. Primero ocupó un puesto en Seguridad Pública y después fue transferido a Desarrollo Económico. Su sueldo en estos momentos se reporta como de 12 mil pesos mensuales.
Sería tremendamente injusto que Rocío Rebollo tuviera que haber despedido a Gerardo porque invitó como tesorero a Miguel ¿qué culpa tendría el primero de que su hermano ocupe una de las principales carteras del ayuntamiento? Se trata del sustento de personas que se logra con su trabajo. Aquí no cabe discusión, no se vale buscarle tres pies al gato.
Sin embargo, la cosa es absolutamente distinta en el caso de Chibli Campos, vástago de propio tesorero, quien ingresó a la nómina el 17 de febrero del presente año, al puesto de inspector de Ejecución Fiscal con una remuneración de 10 mil pesos al mes. Justifica el hecho el señor tesorero aduciendo que necesitaba una persona de confianza para que le ayudase, y que inclusive su hijo asiste a su padre luego de sus actividades en Ejecución Fiscal.
Es ya una historia muy conocida, cada vez es más común que estas cosas sucedan, vaya, en Coahuila todo apunta a que habrá sucesión entre hermanos, y cuando Humberto Moreira inició su gestión en 2005, su hermano Rubén, candidato del PRI a la gubernatura, se desempeñaba como subsecretario de Gobierno, y nadie dijo gran cosa. En el caso coahuilense, el cálculo era que como ocurrió, Humberto se iría poco antes para no ser quien personalmente le transfiriera formalmente el poder, pero cuando esto se fraguó, no era claro en el panorama político que el hoy gobernador con licencia ocuparía la presidencia nacional de su partido.
Así que tampoco este asunto es para hacer gran escándalo. El problema en particular es que es claro que el ayuntamiento de Gómez Palacio ha sufrido evidentemente los últimos años una serie de funcionarios que han menoscabado sensiblemente el patrimonio del municipio. Desde tiempos de Rendón, pasando por Ricardo Rebollo y el interinato de Mario Calderón, la actual presidenta al asumir el poder, tuvo que hacer grandes esfuerzos para no llevar a la total insolvencia a su administración, y en ello el tesorero Miguel Chibli ha sido un eslabón importantísimo para evitar la total debacle. De hecho, hay quienes ansían torpedear hasta reventarlo, ya que es un escollo para poder seguir cometiendo pillerías contra la administración.
Por eso es una pena que esto se haya confirmado, más que nunca se necesitan personas que estén blindadas ante ataques políticos, cuando están haciendo bien su función. El arrebato al contestarle a la periodista de El Siglo cuando le preguntó si esta situación era nepotismo, diciendo: "Si quiere verlo de esa manera no tengo nada qué decir, yo no ando con mentiras..." está demás, su labor ha sido importante en la recomposición de las finanzas de Gómez, ojalá esto no le impida seguir realizando su función como aparentemente la ha realizado.
La mañana de ayer en un noticiero de proyección nacional, apareció el presidente del PRI, el coahuilense Humberto Moreira, bailando música popular con gran soltura en un evento de su partido con motivo del Día de las Madres. Cuando era candidato a gobernador y ya en los primeros tiempos de su gestión, era frecuente que Moreira bailara como trompo chillador con mucha gracia, sin duda. Al tiempo intempestivamente dejó de hacerlo en actos públicos, chismecillos señalaban que su esposa le jaló la rienda y le sugirió que dejara de hacerlo. Pues acaba de volver a las andadas con gran maestría, sin duda.
El paso de la tortuga te voy a enseñar, camina "pa'delante" camina "pa'trás" lo ejecuta en su danza en estupendo ritmo. Los coahuilenses sabíamos de sus grandes dotes de bailarín, ahora ya se demostró a nivel nacional. Muy simpático la verdad.
Eirazoqui@elsiglodetorreon.com.mx
