La mayoría eran niños. Personas velan el cuerpo de sus familiares fallecidos en el accidente de un autobús, en Kalarkahar.
Al menos 37 personas murieron, la mayoría de ellos niños, y 69 resultaron heridas cuando el autobús en el que viajaban cayó por un barranco en la provincia de Punjab, en el este de Pakistán, informó ayer la policía paquistaní. El accidente ocurrió al filo de la medianoche del lunes cuando el autobús, que transportaba estudiantes y personal escolar, regresaba a Lahore tras concluir una excursión por las famosas minas de sal Kallar Kahar y Khewra, reportó el diario local The Nation.
El conductor perdió el control del autobús, al parecer debido a una falla mecánica de los frenos, por lo que el vehículo salió de la carretera y cayó dando vueltas por un barranco. Las autoridades señalaron que al menos 37 personas perdieron la vida y temen que la cifra de víctimas mortales aumente en las próximas horas ya que los 69 lesionados se encuentran en condiciones graves.
En el autobús, de 72 asientos, viajaban 101 estudiantes, además de cinco trabajadores de la escuela y el conductor, estos seis últimos murieron en el accidente. Pakistán tiene uno de los peores records de accidentes de tráfico, atribuidos a las malas condiciones de los caminos y carreteras, así como al pésimo estado de los vehículos.
MUEREN 11 NIÑOS
Por su parte, cientos de personas salieron ayer a las calles de Kabul para condenar el asesinato del expresidente Burhanuddin Rabbani y exigir el fin de la violencia, mientras que 18 personas murieron, 11 de ellas niños, en dos nuevos atentados.
Al grito de ¡'Rabbani murió por la paz'! y ¡'Muera el Talibán'!, los manifestantes responsabilizaron a la Dirección de los Servicios de Inteligencia de Pakistán (ISI) de la muerte del expresidente afgano.