Moreira Valdés rechazó que 'sea tapadera de las presuntas irregularidades que le imputan a su hermano Humberto Moreira'.
El candidato del Partido Revolucionario Institucional a la gubernatura de Coahuila, Rubén Moreira Valdés, negó que su triunfo se trate de una sucesión familiar, porque los ciudadanos le dieron su voto.
Luego de una jornada electoral que calificó de histórica por la afluencia de votantes, Moreira Valdés rechazó que 'sea tapadera de las presuntas irregularidades que le imputan a su hermano Humberto Moreira'.
Aclaró que el caso en el escrutinio público él resultó ganador en la contienda electoral y refrendó su disposición de trabajar con el presidente de la República, Felipe Calderón, por el bien de Coahuila y de México.
Aseguró que las elecciones ya terminaron, por lo que extendió la mano a sus adversarios políticos para iniciar los trabajos por un mejor Coahuila.
Agradeció a todos los coahuilenses su voto en esta elección, que reconoció, tuvo algunos incidentes menores pero fue tranquila y en donde el voto se ejerció con libertad.
Insistió que 'ya concluyó la elección y ya les toca mirar hacia adelante para construir con concordia el desarrollo de la entidad con más escuelas, más empleos e infraestructura y carreteras'.
Dijo que se ganaron los 16 distritos que estuvieron en disputa y refrendó que gobernará para todos, y buscará llenar las expectativas y anhelos de hasta quienes no votaron por él.
En ese sentido, reconoció sentirse satisfecho y contento de esta jornada electoral y declaró que desde mañana empezará a trabajar para tener un mejor gobierno a partir del 1 de diciembre.
Ofreció también olvidar agravios de sus adversarios porque insistió la elección quedó atrás.
Finalmente externó estar dispuesto a trabajar con el secretario de seguridad Pública Federal, Genaro García Luna, por el bienestar de la entidad.
