El secretario técnico del Consejo Nacional de Seguridad, Alejandro Poiré, descartó que México sea uno de los países más violentos del mundo, a pesar de "los desafíos en materia de seguridad que viven algunas zonas del país como Tamaulipas, Chihuahua y Sinaloa, que en los últimos años han focalizado la violencia asociada a la competencia criminal".
"Como país, a pesar del aumento registrado en los últimos años, mantenemos una tasa de homicidios significativamente menor que la de varios países de la región latinoamericana", refirió el funcionario en el décimo mito de la serie "10 mitos de la lucha por la seguridad".
Añadió que "aún frente a aquellas experiencias reconocidas en el ámbito internacional por hacer frente a la criminalidad en beneficio de sus comunidades, como es el caso de Colombia, México tiene una tasa de homicidio claramente inferior. Incluso Brasil tiene una tasa de homicidios similar a la de nuestro país", refirió.
En este sentido, explicó que varias ciudades mexicanas, como Veracruz, Hermosillo y el Distrito Federal mantienen tasas de homicidio menores a las de ciudades estadounidenses como Washington o Saint Louis.
Agregó que en otras localidades como Tijuana y Ciudad Juárez, donde hay situaciones "más sensibles" en materia de inseguridad, "la Estrategia Nacional de Seguridad ha comenzado a rendir sus primeros frutos".
En Tijuana, explicó, mientras que durante los meses de noviembre y diciembre de 2008 se cometía un promedio diario de siete asesinatos, para los mismos meses de 2010 se registró en promedio uno al día.
En tanto, en Ciudad Juárez, Chihuahua, desde el inicio de este año al mes de julio, el promedio de homicidios diarios que se cometen en la localidad se ha mantenido en cinco, es decir, la mitad de los que se registraban en los meses de septiembre y octubre de 2010.