Gira. El presidente Felipe Calderón presidió el acto 'Cobertura Universal de Salud', en el Hospital Infantil, en Ciudad Juárez, Chih.
Tras sostener que los delitos en la urbe más violenta del mundo van a la baja, aunque "no sin sobresaltos", el presidente Felipe Calderón consideró que no es dable bajar la guardia en el combate al crimen organizado.
El mandatario efectuó una visita relámpago a Ciudad Juárez para anunciar la "cobertura universal" en materia de salud de Chihuahua y, en agenda privada, grabar spots promocionales de su V Informe de Gobierno. Acompañado por el gobernador César Duarte, Calderón felicitó a las fuerzas federales del orden por haber apresado, uno a uno, a los principales responsables de la violencia que azota a Juárez y, particularmente, por la detención de José Antonio Acosta Hernández, "El Diego", el cabecilla del grupo criminal de La Línea, que presuntamente ordenó el asesinato de mil 500 personas, entre otros, de los 15 muchachos de Villas de Salvárcar.
"Estamos recuperando entre todos y fortaleciendo el orgullo de ser juarenses, la esperanza de ser juarense, reactivando esta gran ciudad (y) reduciendo, no sin sobresaltos, los índices de criminalidad. Vamos a seguir velando por los juarenses, no sólo enfrentando a la criminalidad, sino sobre y todo abriendo oportunidades sociales para las y los juarenses, especialmente para los jóvenes", dijo.
De entre el centenar de invitados que acudió al Hospital Infantil de Especialidades, se escuchó la voz de un hombre en silla de ruedas en el momento en que el presidente abría su intervención: "Hay gente que está en la cárcel." Aparentemente -los reporteros fueron retirados--, Calderón se acercó a conversar con esa persona. Tras ratificar su compromiso de velar por la seguridad de los juarenses, el mandatario celebró la "significativa reducción" de los niveles de violencia, por lo cual consideró que no era pertinente "bajar la guardia"; sobre todo, apuntó, en razón de que "no está terminado el trabajo".
